Con recetas tradicionales y otros muy innovadoras, casi vanguardistas, han abierto en la mañana de este viernes los 36 puestos de caracoles que salpicarán las calles y plazas de Córdoba durante más de cien días, hasta mediados de junio. Acompañados de un sol espléndido y de unas temperaturas que alcanzarán los 22 grados, junto con las ollas a plena ebullición, todo estaba listo a las 11.30 horas para atender a los primeros clientes, deseosos de degustar el plato más popular de la gastronomía cordobesa.
"¡Una de chicos!" ha sido la primera comanda que ha servido el puesto de Caracoles Noreña justo unos minutos después de la apertura, según ha comentado el dueño, Juan Carlos Oliva, que tiene previsto servir unos cien kilos diarios. "Tenemos todas las recetas preparadas", ha anunciado. Y, no es poca cosa, porque junto al caracol chico, que "es el que más se vende", la variedad de platos de caracoles que ofrece supera la media docena, entre ellos a la cerveza, que en la temporada del año pasado fue el que más éxito tuvo por "la delicadeza de la espuma".
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Sin restricciones como en los dos años anteriores debido a la pandemia, el ambiente entre los caracoleros es de "mucha ilusión" y de que esta temporada, si el tiempo acompaña, va a ser mejor que buena. "Me imagino que todos estamos muy ilusionados, porque en Córdoba hay muchísimas ganas ya de comer caracoles", ha afirmado el presidente de la Asociación de comerciantes Caracoleros de Córdoba, Cristian Pérez, mientras removía una olla de caracoles guisados. Las temperaturas primaverales que se pronostican para los próximos días, unido a un horario amplio y continuo desde las 11.30 hasta las 23.30 horas, junto con los nuevos platos que han preparado en casi todos los puestos para sorprender a los paladares más exigentes y sofisticados auguran que se puedan consumir un total de 3.000 kilos de caracoles de todas las variedades a diario a lo largo de estos meses en los puestos, ha calculado el presidente de los caracoleros de Córdoba.
Las horas, en la que esperan más bulla, se sitúan por la tarde entre las 19.00 y las 20.00 horas, aunque no descartan que antes de la hora de comer se acerque más de un cordobés a volver a degustar una de chicos o "la receta nueva diaria que haremos todos los días. Hoy, tenemos caracoles al roquefort", ha apuntado Rafael Muñoz, del puesto de Cruz de Juárez.
Novedades en la exquisita carta de cómo preparar los caracoles no van a faltar este año, como por ejemplo las croquetitas de caracoles de Caracol Exprés o el cremoso de marisco en el puesto de Noreña e incluso el más veterano, el de la Magdalena, que se ha atrevido a ofrecer a los cordobeses caracoles a la Manuela. Sin olvidar, la última incorporación a la carta del puesto de Cristian Pérez, cerca de Carrefour-Zahira, que lleva el nombre de Capricho cordobés.
"Todos los días no tenemos preparadas todas las especialidades", ha reconocido Mari Cruz Pérez Nevado, de Caracol Exprés, ya que son más de veinte las recetas especiales que tiene en su menú. Pese a esta variedad, ha apuntado que "a eso de las 21.30 horas, al menos el año pasado, se había vendido todo. Nos quedamos sin nada".
Lo que no va a cambiar esta temporada respecto a las anteriores es el precio de los caracoles, que oscilan entre poco más de un euro para las recetas tradicionales y algo más de tres para las innovadoras. "Hemos mantenido los precios", han asegurado tanto la responsable de Caracol Exprés, Mari Cruz Pérez Nevado, como uno de los dueños del de la Magdalena, Rafael Pérez, para animar a los cordobeses a que los consuman.
