La comisión de investigación del Imdeco ha rechazado hoy por mayoría la propuesta de dictamen que el secretario de dicha comisión, el concejal Rafael Saco de Vox, había elaborado y que debía someterse a votación de los grupos municipales. La sesión ha tenido tintes surrealistas, entre otras cosas, porque algunos grupos han negado la existencia del dictamen que han terminado votando. Solo el Partido Popular se ha abstenido, ya que ni siquiera Vox —que lo había redactado— ha votado a favor. En dicho dictamen, a priori un resumen de las conclusiones presentadas por todos los grupos municipales y que incluía seis puntos de resoluciones, se exculpaba a Manuel Torrejimeno, presidente del Imdeco, al considerar que no se ha acreditado en las sesiones de esta comisión ni en sus comparecencias “ninguna práctica irregular» por su parte. También se determinaba que el delegado de Deportes actuó en todo caso fruto de la "inexperiencia", que no hubo acoso laboral del edil Cs hacia la exgerente y hoy concejala de Casco, María Luisa Gómez, y que no hay fundamento para pedir responsabilidades políticas.

Solo el Partido Popular se ha abstenido en la votación del dictamen, mientras que el resto de grupos municipales —incluido Vox que era el proponente— han votado en contra. Cada uno por sus razones específicas, pero todos en general por considerarlo insuficiente. Así, desde el grupo municipal de Vox se ha argumentado el voto en contra por estar ausente del dictamen la figura de María Luisa Gómez Calero, a quien responsabilizan de haber instado a constituir esta comisión de investigación para después negarlo todo, incluido el supuesto acoso laboral que ejerció sobre ella el presidente del Imdeco; mientras que desde Ciudadanos se ha justificado el voto en contra por entender que no debería incluir el punto del dictamen que determina que existen ciertos puntos reflejados en el email que Torrejimeno envió a la gerente “hubiesen rayado la supuesta ilegalidad de haberse llevado a cabo”.

Desde IU se ha insistido en calificar de “vergüenza” el hecho de que el dictamen se haya filtrado a los medios de comunicación, mientras que para el PSOE el dictamen es simplemente insuficiente y la comisión "no ha servido para nada".

Así las cosas, incapaces de ponerse de acuerdo, la comisión ha fijado un nuevo plazo el 25 de enero para volver a intentarlo. En estos momentos, se desconoce si Vox que ostenta la presidencia de la comisión hará una nueva propuesta de dictamen o si cada uno de los grupos llevará las suyas y se votará por separado.