Casi la mitad de los 501 pacientes, 239 (47,7% del total), que en toda la pandemia han ingresado en Córdoba en una unidad de cuidados críticos por coronavirus corresponden a la suma de los que ha habido en la tercera ola y lo que algunos expertos ya llaman cuarta ola. En las últimas semanas, el perfil del paciente que es derivado a una uci en Córdoba es más joven, explicó el lunes el consejero de Salud, Jesús Aguirre. En la actual fase de la crisis sanitaria, el enfermo de covid que ingresa en una uci tiene una edad media de 65 a 67 años, incluso inferior, debido a que la mayoría de la población de más de 80 años, que era la que antes ocupaba más puestos en críticos, ya está vacunada. En esa misma línea, la directora gerente del Reina Sofía, Valle García, hablaba la semana pasada de algunos casos en la uci de este hospital por covid de 30 a 40 años. Además, el consejero precisó que, actualmente, un 20% de hospitalizados por la pandemia acaba en uci, frente a un 15% que lo hacía en anteriores olas.

Araceli Lacerda, de 59 años, pertenece al grupo de pacientes covid de Córdoba, que ha permanecido en una uci con neumonía bilateral y conectada a respirador en fechas recientes, sin formar parte de la tercera edad. Esta cordobesa coincidió con su marido, también de 59 años, en el hospital Cruz Roja. Su esposo estuvo en planta una semana y ella 20 días en uci y 8 en planta. «Me decían para animarme y salir adelante que pensara en mis hijos y en mi nieto Santi, porque era muy duro estar tanto tiempo boca abajo en la cama, técnica que contribuye a una mejor recuperación, pero que es muy molesta», relata. Araceli recibió el alta el pasado lunes, pero está en casa con medicación y oxígeno. Se encuentra muy cansada y ha perdido masa muscular.

María Isabel Arias, de 50 años, estuvo dos semanas en la uci.

María Isabel Arias, de 50 años, estuvo dos semanas en la uci. A.J. GONZÁLEZ

Reconoce que además de secuelas físicas, la infección le ha afectado emocionalmente, al vivir sus hijos fuera de Córdoba y haber aplazado su hijo su boda dos veces. «El trato en uci y planta de todo el personal de Cruz Roja ha sido excepcional. La jefa de la uci, Noelia Muñoz, nos ponía música relajante. Y, cuando me dieron el alta, fue muy emocionante porque me pusieron al salir una canción que elegí yo, Color esperanza, de Diego Torres», resalta.

Otro testimonio

María Isabel Arias, de 50 años, pasó todo el inicio de la tercera ola en la uci del hospital San Juan de Dios, 13 días en uci y 4 en planta, incluyendo las navidades. Estando ingresada, dio positivo también su marido, que es médico y fue asintomático, y uno de sus dos hijos, que tuvo síntomas leves. Durante su hospitalización, y con los pulmones muy afectados, veía con impotencia, a través de las redes sociales, cómo la gente disfrutaba de la Navidad, sin respetar muchas veces las medidas de prevención aunque ya empezaba la tercera ola. Consejos para evitar el contagio que ella y su familia sí han cumplido, por lo que no sabe cómo pudo al final enfermar. «Dentro de lo mal que estuve no me tuvieron que intubar. He recibido una atención inmejorable en San Juan de Dios, de parte de unos profesionales con una gran calidad humana. Además, mi fe y toda la gente que ha rezado por mí me ayudaron a mejorar. Se me cayó mucho el pelo y aún me canso. Además, tengo mucho dolor en los huesos y articulaciones, pero espero encontrarme bien pronto», destaca.