- Hace un año se declaró el estado de alarma. ¿Qué cree que se ha hecho bien y qué se debería haber evitado?

- Hemos vivido una situación muy difícil y cambiante que ha hecho que se hayan ido tomando decisiones, más o menos acertadas, ante el desconocimiento de lo que iba a pasar. En el ámbito local se ha demostrado que, si queremos, podemos trabajar todos juntos, dejando a un lado las diferencias y aunando esfuerzos para anteponer el interés general de nuestros vecinos. Por desgracia, esa unidad no se ha visto reflejada a nivel nacional, donde la oposición ha visto en la pandemia una oportunidad para desgastar al Gobierno.

- ¿Qué considera prioritario en esta nueva etapa en la que nos encontramos?

- Es momento de no dejar a nadie atrás, por lo que es necesario que se movilicen todos los recursos posibles para superar la crisis sanitaria y atender la crisis económica y social que sufrimos. Desde nuestro ayuntamiento estamos atendiendo dichas necesidades mediante el aumento de partidas económicas destinadas a emergencia social, planes de ayudas a empresas y planes de empleo para atender a las personas más vulnerables. Pero, además del apoyo que estamos recibiendo de la Diputación, necesitamos que la Junta de Andalucía salga de su burbuja y destine recursos a los municipios, puesto que, a día de hoy, seguimos sin recibir un solo céntimo de la Administración autonómica.

- ¿Se muestra optimista con una pronta recuperación de la economía de Córdoba y por qué?

- Quiero serlo, puesto que es necesario para encarar el futuro con esperanza. Es el momento de aprovechar los recursos que llegarán de Europa, que suponen una oportunidad para construir una nueva economía, más sostenible, en la que tendrá prioridad la transición ecológica, donde comarcas como el Guadiato, que ha sido generadora de energía, tiene que jugar un papel primordial. Necesitamos superar esta situación y salir adelante, y esas ganas de superación tenemos que aprovecharlas. Las administraciones tenemos que favorecer que las iniciativas pasen de las palabras a los hechos.

- ¿Cuál ha sido para usted la mayor enseñanza de esta situación?

- La solidaridad y la vulnerabilidad. En los momentos más duros sacamos lo mejor de nosotros y nos ofrecimos a ayudar al prójimo en lo que estuviera en nuestra mano. Y sobre todo nos hemos dado cuenta de que el mundo en el que vivimos puede cambiar de un momento a otro. Tenemos que aprender a marcar prioridades, a valorar más la familia y amigos.