El portavoz del Partido Popular, Miguel Ángel Torrico, ha negado que en el Ayuntamiento de Córdoba haya problemas de transfuguismo con la incorporación de María Luisa Gómez Calero, tal y como denunció ayer la oposición después de conocerse que la nueva concejala entrará en el grupo municipal de Ciudadanos como independiente, a pesar de haber sido expulsada por esta formación política tras su enfrentamiento con Manuel Torrejimeno. Torrico ha asegurado que en el Partido Popular y Ciudadanos no salen de su asombro ante la postura tomada por PSOE, IU, Vox y Podemos, y no saben si atribuirla a “la ignorancia de la ley” y del reglamento municipal o a “la desfachatez política”, algo que sería más preocupante todavía. “¿Chanchullo, fraude? ¿A qué se están refiriendo? Es lo normal en democracia, que pasa a ocupar el puesto el siguiente en la lista. ¿O acaso pretendía la oposición, de la extrema izquiera a la extrema derecha alterar el funcionamiento del Ayuntamiento, alterar el resultado que decidieron los cordobeses en las urnas?”, han preguntado Torrico para quien lo anómalo hiubiese sido que la nueva concejala pasara al grupo de los no adscritos. “Lo normal es que pase lo que ha pasado, que la concejala se integre a su grupo (Cs) sea afiliado o no”, ha añadido para recordar que en el grupo municipal hay dos personas en esa situación: Blanca Torrent y Bernardo Jordano, ambos independientes.  

Asimismo el portavoz popular asegura que se ha hecho lo mismo que en los anteriores relevos que se han producido en esta Corporación, y ha recordado que la figura del concejal no adscrito es una figura “extraordinaria” que penaliza a edil que se pasa a otro grupo porque se entiende que no cumple con la voluntad de los votantes. En este sentido, los populares entienden que a la oposición le cuesta aceptar lo que ha ocurrido porque PP y Cs han sido capaces de adoptar con naturalidad una situacion de la que la oposición esperaba sacar “rédito político”. Torrico ha subrayado que la decisión es “legal” y ha vuelto a considerar “lamentable” que la oposicion con el objetivo de hacer más débil al gobierno local haya tenido que recurrir “a este tipo de presiones públicas”, ha dicho, para añadir que desconoce si ha habido “presiones privadas” hacia la concejala. En último lugar, ha criticado la operación que Vox lleva a cabo en Murcia y la “doble vara de medir” de los partidos en función de sus intereses y cálculos electorales. “Este ruido no nos va a distraer de nuestro objetivo de hacer una ciudad mejor”. 

En último lugar, se ha preguntado si Vox e Izquierda Unida quieren reeditar “la pinza” porque considera “sorprendente” la coincidencia de planteamientos de sus dos portavoces. 

Por otro lado, el portavoz del PP ha defendido que María Luisa Gómez vaya a hacerse cargo de la Delegación de Casco Histórico, que hasta ahora ha ostentado el grupo municipal popular, porque ha dicho que “no hay delegaciones de PP y Cs” si no que todas son del alcalde. Además, ha explicado que aunque se acordó al principio del mandato un acuerdo de gobernabilidad con una distribución proporcionada de las áreas, ese acuerdo se pueden alterar en cualquier momento, como así se ha hecho. 

Presupuestos en peligro 

Preguntado por la posibilidad de que los presupuestos municipales corran peligro por la postura expresada por Vox hacia esta cuestión, Miguel Ángel Torrico ha afirmado que le parecería “una simpleza” e  “infantilismo” por culpa de “una rabieta” que así ocurriera, y ha recordado que se pueden poner en peligro retos tan serios como los 25 millones para el convenio con Defensa de cara a la implantación de la base logística.  

Asimismo, el portavoz popular ha dicho que en Córdoba no es necesario firmar un acuerdo entre PP y Cs, como se hizo ayer en el Gobierno andaluz, para blindar el traspaso de concejales de un partido a otro. “Nosotros ya tenemos ese acuerdo de 15 de junio del 2019, con un reparto de delegaciones y un acuerdo de 77 medidas. No lo entendemos necesario”, ha aseverado aunque ha dicho entender que sí se haga a nivel andaluz para que “cada representante esté en la lista en el que fue elegido”. 

Esa postura de PP y Cs en Andalucía contrasta con la adoptada por los populares a nivel nacional, ya que su secretario general, Teodoro García Egea, ha llamado a los cargos de la formación naranja a entrar en “la casa común del centro derecha” que representan las siglas de Génova. Para Torrico, el único caso que se conoce en este sentido, el de Fran Hervías, es “blanco y en botella” porque ha renunciado a su acta y se ha incorporado al PP, no se ha llevado su acta a las filas populares.