El Plan Turístico de Grandes Ciudades le va a salir caro a Córdoba. La primera teniente de alcalde, Isabel Albás, ha cifrado en 494.963 euros el montante que debe devolver el Ayuntamiento de la ciudad a la Junta de Andalucía de la diferencia entre el importe adelantado por la administración andaluza (2.249.100 euros) y el importe justificado y aceptado por ellos (1.754.136 euros). Por otro lado, corresponde al Consistorio tramitar un procedimiento de pérdida de derecho al cobro por valor de 749.700 euros, correspondiente al 25% restante que estaba pendiente de pago. Albás ha confirmado esas cifras a pesar de que hace unas semanas se mostró convencida de que la ciudad no tendría que devolver dinero del plan turístico ya que había logrado justificar más del 50% de las obras.

Albás recordó que cuando llegaron al Ayuntamiento, dentro del Plan Turístico de Grandes Ciudades, había dos grandes obras en proceso de resolución del contrato: Templo Romano y Convento Regina. "Ha sido un trabajo de chinos justificar las obras, que estaban de forma muy complicada", apuntó. Además ha acusado a Pedro García, presidente del Imtur en el anterior mandato, de no haberse "comprometido realmente de una forma firme" con el plan ni con la ejecución de las obras del Templo Romano, que se han hecho solo al 48%, y del Convento Regina, que de casi 1 millón que tenía de presupuesto solo se ha ejecutado solo 178.000 euros. A finales de enero, IU denunció que Cs había renunciado al Plan Turístico de Grandes Ciudades en Córdoba y dudaba de la imposibilidad legal de solicitar una nueva prórroga, como había sostenido Albás. Pedro García lamentó también la pérdida de las ayudas millonarias.

En este sentido, la responsable de Turismo aseguró que el problema ha sido que la Junta de Andalucía ha dicho que "las acometida realizadas en el Concepto Regina no se pueden conceptualizar como de uso turístico", con lo cual hay "una serie de conceptos económicos que no se van a poder acoger a la subvención". Además respecto a lo que se pierde del dinero de este plan, Albás lamentó que la ejecución de obras haya sido tan baja para dar pie a eso. En este sentido, puso de ejemplo los 100.000 euros que se iban a destinar a la iluminación del Puente Romano, que la Junta de Andalucía no autorizó porque consideraba que impactaba negativamente desde el punto de vista visual en el monumento. Albás explicó que están a la espera de que la administración andaluza les dé permiso para destinar ese importe a la rehabilitación del Alcázar de los Reyes Cristianos.