La incertidumbre causada por el coronavirus frena casi una decena de proyectos en Córdoba, que van a un ritmo más lento que el que tenían previsto a la espera de que lleguen tiempos mejores. Se trata de iniciativas que no están descartadas pero que no se acometerán a corto plazo y para las que no hay fecha de inicio, ya que están condicionadas a lo que ocurra en los próximos meses y a que se despeje el panorama de inseguridad actual. En esa situación está un barrio entero, varios hoteles, un centro comercial y otros proyectos privados (entre los públicos no es raro encontrar, con pandemia o sin ella, una larga lista de iniciativas que no avanzan o que lo hacen a un ritmo muy lento).

Codel de Écija

El Cordel de Écija, ese barrio que iba a promover Lar con un centro comercial similar al Lagoh de Sevilla, se encuentra en una situación algo curiosa. Lar no ha comunicado aún oficialmente que abandona el proyecto, para el que presentó en Urbanismo una innovación de PGOU antes de la pandemia firmada por otros arquitectos distintos a los artífices de la iniciativa (Pedro García del Barrio y Rafael de la Hoz), que recibió críticas de quienes consideraban que se apartaba de la idea que había sido aprobada por el Pleno del Ayuntamiento durante el anterior mandato. La versión de Lar desde hace meses es que el plan está en 'stand by'. Es más, en la presentación de los resultados del tercer trimestre del año aseguró que «las decisiones sobre nuevos proyectos no se tomarán hasta que la situación sanitaria mejore». Sin embargo, otras fuentes consultadas afirman que Lar ha abandonado la iniciativa y que no mantiene el contrato de opción de compra con Aliseda, propietaria de los terrenos que iba a adquirir para desarrollar el proyecto. Lar realizaría una inversión inicial de entre 170 y 250 millones de los más de 500 necesarios.

Esto no significa que el plan para urbanizar el Cordel muera, ya que, según otras fuentes, hay tres inversores interesados en ejecutarlo siguiendo la filosofía inicial de ecobarrio con un 50% de zona residencial, un 25% de espacio comercial abierto y un 25% de equipamientos. Los arquitectos impulsores del plan adaptan ya el proyecto a un escenario post-covid para que esté en la línea de los fondos europeos Next Generation.

Rabanales 21

Hay otro proyecto que antes de la crisis provocada por el covid no avanzaba al ritmo previsto pero que la pandemia ha complicado, el parque comercial de Rabanales 21, que antes de las municipales del 2019 iba a solicitar licencia en Urbanismo al tener ya compromisos de ocupación. Según fuentes conocedoras del proyecto, la incertidumbre generada por el brexit, primero, y la crisis causada por el coronavirus, después, han hecho que los inversores se echen para atrás y que la iniciativa se quede parada a la espera de que la situación mejore.

El parque comercial de Retesa, Rabanales Plaza, está planificado en una parcela de 40.000 metros cuadrados que necesitó una innovación de PGOU que requirió tres años de tramitación y culminó en diciembre del 2017. El proyecto contempla salas de cine, un establecimiento de comida rápida, un restaurante, un negocio de electrodomésticos, un gimnasio y una empresa de bricolaje.

Entre la lista de más de una docena de hoteles de cuatro y cinco estrellas proyectados en Córdoba, a la que proporcionarán más de 1.300 plazas, hay varios aparcados a la espera de que se despeje el panorama incierto que deja la pandemia. Uno de ellos es el hotel de cinco estrellas de la calleja de las Flores y Encarnación, promovido por Lisong Investments, que tiene licencia de obra desde hace año y medio y que se quedó parado en el proceso de licitación. Sus promotores están pendientes de cómo evolucionará la vacunación y de cuándo recuperará la normalidad la movilidad. Además, aseguran que han de ver si tienen que realizar retoques en el proyecto para adaptarlo a la era post-covid.

La pandemia ha ralentizado el hotel de cuatro estrellas que surgirá de la rehabilitación del convento de Santa Isabel, con licencia de obra desde hace un año. La obra se encuentra en la fase de licitación pero, según las fuentes consultadas, por ahora, no hay expectativas de iniciarla. Otro cuatro estrellas, el del Palacete de El Brillante, está entre las iniciativas paradas de momento. Hay más hoteles con licencia pero no han indicado a este periódico su situación.

No todo son proyectos. También hay obras iniciadas que van a un ritmo más lento del que deberían, afectadas por la pandemia. Dos de ellas son la reforma del Palacio Episcopal, que contará con un centro de interpretación de la Mezquita-Catedral, cuya terminación se retrasa; y la intervención que se lleva a cabo en el santuario de la Virgen de Linares, que recuperará el uso como hospedería.