La Asociación Cordobesa de Jugadores en Rehabilitación (Acojer) reclama a todas las administraciones que intervengan y tomen medidas contra las salas de juego. Acojer, que ayer inició su semana cultural y que hoy conmemora el Día sin Juegos de Azar, lleva ocho años denunciando la proliferación de casas de apuestas sin que sus demandas hayan tenido respuesta. Su presidente, Salvador Secilla, denuncia que si lo normal es que haya una licencia por cada 20.000 habitantes, la cifra es de una cada 12.000, lo que significa que hay el doble. A esto se suma, según indica, que no se deben permitir salas de apuestas que estén a menos de 500 metros de un colegio o de un centro cívico. Secilla considera necesario que se modifique la ley y, sobre todo, «la publicidad tan agresiva que se realiza con líderes de masa». «Las leyes están para cumplirlas», indica, «y no puede haber una sala de apuestas al lado de un colegio». Además, insiste en que «hay que quitar la publicidad agresiva».

La asociación atiende en la actualidad a 300 familias y detecta que cada vez llegan personas más jóvenes con ludopatía, con una edad media de entre 20 y 25 años y eso sin contar a los menores. Acoger percibe un aumento considerable de las apuestas deportivas y de los juegos online, aunque asegura que sigue existiendo adictos a la ruleta y a los juegos presenciales. «La ludopatía no tiene estrato social, lo mismo coge al pobre que al rico», señala.

El presidente de Acojer considera que el Ayuntamiento debe tener en cuenta a la «gente que lleva treinta años trabajando con esta patología». Salvador Secilla aplaude a los vecinos del Campo de la Verdad y del Sector Sur, a los que agradece «el coraje» por sus movilizaciones. «Si todos hicieran igual, otro gallo cantaría», asegura. La asociación pide al Ayuntamiento que cumpla con las dos mociones aprobadas por el Pleno.