La delegación en Córdoba de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA) ha presentado un avance de un informe en el que se analizan las situaciones discriminatorias que sufren las personas migrantes y de minorías étnicas informe en la capital cordobesa, donde se incluye una encuesta que, según esta organización, arroja resultados preocupantes. En ese sentido, según APDHA, "llama poderosamente la atención que el 70% de las personas consultadas respondieran afirmativamente a la pregunta ¿Los/as inmigrantes vienen a España a delinquir? o que a la misma pregunta respecto a las personas de etnia gitana el asentimiento alcanzara casi al 57%."

El avance de este informe ha sido presentado en el marco de la conmemoración del 70º aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, y se centra en un estudio de campo sobre la perspectiva de la ciudadanía cordobesa respecto a la discriminación que afecta a estos colectivos.

Algunos de los resultados obtenidos "son especialmente significativos, y dan idea de la preocupante dimensión de la realidad objeto de análisis", señala APDHA. La muestra, de carácter cualitativo, abarca a cordobeses de todo rango de edad, estrato socioeconómico y lugar de residencia, asegura la asociación. En ella, insisten desde APDHA, "se confirma que los estereotipos sobre estas personas están profundamente arraigados en nuestra sociedad, lo que fomenta los prejuicios y pueden acabar incluso incitando actitudes de intolerancia y odio más extremas".

APDHA señala que estos estereotipos y prejuicios parecen ser resistentes a la realidad, ya que España es el tercer país europeo con menos tasa de criminalidad, y dicha tasa no ha dejado de descender durante los años en que la población migrante crecía en España. APDH remite a una web donde se desmienten con datos todas estas percepciones falsas.

LA PERCEPCIÓN SOBRE EL EMPLEO

De nuevo, la "imagen distorsionada" emerge cuando hablamos del empleo, dice la asociación. Cerca del 56% de las respuestas registradas indican que estas personas restan oportunidades de trabajo a los nacionales españoles, a pesar de que las cifras indican que los trabajadores extranjeros apenas representan el 10% de la fuerza laboral de esas país (incluyendo también a los ciudadanos UE), que ese mismo % es su peso entre los que perciben prestaciones por desempleo o que la precariedad laboral se ceba con mucho más rigor sobre los trabajadores/as migrantes en comparación con los españoles.

El prejuicio lleva incluso a ver muchas más personas refugiadas, o extranjeras en general, de las que realmente hay. El 58% de los cordobeses entrevistados consideraba que hay demasiados refugiados, mientras que la realidad es que el total de la población extranjera en nuestra provincia, tenga la condición de refugiada o no, apenas representa el 2,6%.

Igualmente considera el 57% de los encuestados que las familias refugiadas reciben más prestaciones que las españolas, algo que habitualmente se extiende a todos los inmigrantes en general. Una vez más los datos reales destruyen esta percepción, ya que el número de los usuarios de los servicios sociales de origen inmigrante se reduce a un exiguo 9% en Andalucía o entre los pensionistas en España tan solo se contabilizan menos de un 1% de nacionalidad extranjera.

ESTEREOTIPOS RACISTAS

Otros muchos datos más en el informe confirman que los estereotipos de tinte racista y xenófobo están fuertemente asentados en nuestra sociedad. "Pero a nuestro juicio --señalan en APDHA--, lo más peligroso es que no hay una conciencia social de ello: después de dar el tipo de respuestas que hemos descrito, la mayoría de las personas entrevistadas afirmaban no tener prejuicios respecto a la población migrante y las minorías étnicas (45%), ni haber actuado nunca de forma discriminatoria respecto a ellas (61%)".

Desde la APDHA reivindican a los poderes públicos medidas urgentes de sensibilización para combatir este tipo de percepciones negativas sobre colectivos especialmente vulnerables, como son la población de origen migrante y las minorías étnicas, haciendo un especial hincapié en el ámbito educativo.

Igualmente, hacen un llamamiento a la responsabilidad a medios de comunicación y a las formaciones políticas a la hora de tratar noticias y realizar campañas electorales en esta materia, "ya que la frivolización, cuando no directamente la manipulación, generan el caldo de cultivo perfecto para la intolerancia y el crecimiento de la ultraderecha, como tristemente hemos comprobado en los últimos comicios andaluces".