La familia de Jaime G.P., el hombre de 37 años que falleció en la madrugada del sábado tras recibir 11 puñaladas en el Paseo de La Victoria, después de una discusión con su agresor en un pub de Ciudad Jardín, exigió ayer "que se haga justicia y que se averigüe lo más rápido posible" lo ocurrido y la responsabilidad del detenido por estos hechos. "Que pague, que ha habido ensañamiento", reclamó en declaraciones a Diario CORDOBA Abraham, hermano de la víctima, poco antes de darle su último adiós en el cementerio de Nuestra Señora de la Fuensanta. Mientras, el arrestado, S.M.L.M., de 34 años y que según las fuentes consultadas por este periódico contaba con antecendentes, ya ha pasado su segunda noche en la cárcel después de que el juez decretara el sábado por la tarde su ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza como presunto autor de un delito de homicidio.

"Ha sido una muerte maldita e injusta, y no hay derecho", se lamentó Amelia, una de las tías de Jaime, a las puertas del tanatorio. "Le ha pasado por defender a un amigo, como siempre hacía sin importarle nada más. No es justo esto. Todo lo que tenía lo daba", añadió su hermano. "Ahora a ver si hay justicia, porque el agresor está vivo, pero mi sobrino está muerto", apuntó entre lágrimas Amelia, al tiempo que su marido Pepe concluía con un rotundo "nos han destrozado la vida a toda la familia". De su lado, el padre de Jaime, Juan Antonio, que ayer no quiso hacer declaraciones, dejó claro su mensaje en Facebook : "Anoche por la madrugada del sábado un mal nacido acabó con su vida. Espero que se pudra entre rejas".

LOS HECHOS Según el relato de la Policía y los detalles que conoce la familia, todo comenzó en un pub situado en la calle Antonio Maura. Allí, al parecer, el hombre que posteriormente fue detenido, mantuvo un altercado con un amigo de la víctima tras empujar al hijo del primero. La discusión subió de tono y, según algunos testigos, el agresor blandió un cuchillo ante los implicados. Pero lejos de acabar la trifulca cuando el hombre armado abandonó el local, esta se reprodujo después de que Jaime y su amigo salieran tras de él. Pero, ¿por qué lo persiguieron cuando ya se había marchado?, ¿por qué no dejaron correr la situación? "El agresor iba a huir y lo que intentaban era retenerlo para que no pudiera hacer daño a nadie", explicó una amiga de Jaime. "Tenían que haber sido los mismos del pub los que avisaran a la Policía y nada de esto hubiera pasado", se lamentó ayer la familia. El caso es que alcanzaron al agresor en la parada de taxis del Paseo de La Victoria, junto a la entrada del párking subterráneo, y, tras un intercambio de golpes en una intensa pelea, el hombre armado asestó en torno a 11 puñaladas a la víctima, la mayoría en el tórax. Poco después, el hombre al que varios testigos identificaron como el autor de las cuchilladas era detenido en Ronda de los Tejares portando un arma blanca de grandes dimensiones y doble filo.

INCREDULIDAD "Todavía no nos lo creemos", aseguró ayer el hermano. "Parece increíble. Son cosas que ves en televisión y nunca piensas que te puedan tocar a ti. Y le ha tocado a él por ser tan buena persona", apuntó una de sus tías. "Era muy bueno y muy valiente. Eso es lo que le ha matado", señaló su tío Pepe antes de contar otra casualidad trágica: "Mi sobrino camarero de profesión, separado y con un hijo tenía que haber recogido esa noche a su novia de una terraza muy cercana al lugar de los hechos en la que trabajaba poniendo copas. Ella, en vista de que no llegaba, se fue sola del trabajo y pasó junto al revuelo de policías y curiosos en La Victoria. Vio una persona en el suelo, tapada con una sábana, pero nunca pudo imaginar que fuera su pareja" Jaime.