"A la hora de generar ingresos hay dos tipos de políticos: los que se van al banco a pedir un crédito y los que buscan otras vías de financiación". José Abad, alcalde de La Victoria desde el 2003, puso el contador de su Ayuntamiento a 0 con "la única receta posible: ingresar más y gastar menos y mejor", dice, y bromea, "aunque, si te digo la verdad, a veces no sé ni cómo lo hemos hecho". En el 2012, La Victoria acumulaba una deuda de 142 millones, que lograron rebajar a 102 el año siguiente y completamente en el 2014.

Parte del milagro de esta localidad de la Campiña se debe a un proyecto de desarrollo urbanístico puesto en marcha antes de que comenzara la crisis. La Victoria pasó de tener 1.720 habitantes en el 2007 a contabilizar 2.400 en el último padrón. "En el 2015 hay en el pueblo 200 viviendas más que en el 2003, a 500 euros de IBI de media, son 100.000 euros más que ingresa el Ayuntamiento", aclara. "Encima, con recursos propios hemos ampliado el centro de salud y el colegio, y hecho un tanatorio municipal", añade.

En el último año, solo dos localidades han visto aumentar su deuda pública en la provincia: Pedro Abad y Belmez. El concejal de Hacienda perabeño, Miguel García, explica que ese incremento se ha debido a que el Ayuntamiento se ha subrogado un crédito que tenía pendiente una empresa municipal y a la firma de otro nuevo, en diciembre del 2014, para afrontar la construcción de un campo de fútbol en la localidad. "Por eso se nota menos que hemos disminuido tanto la deuda financiera como la deuda a proveedores --afirma--. Contando las dos, se habrá reducido unos 300.000 euros", justifica.

Cardeña es una de las localidades cordobesas que más años lleva libre de los números rojos. En el 2007, cuando IU salió del Consistorio ya estaban a 0 y en el 2015, cuando Trinidad Moreno (PP) le pasó el testigo a Catalina Barragán (IU), seguían igual. "Ahora hemos tenido más suerte que la vez anterior, en el año 91, cuando heredamos una deuda de más de 90 millones de las antiguas pesetas". Aunque las arcas están saneadas, la alcaldesa critica que la anterior Corporación ha gastado en cosas "superfluas" mientras algunas personas de Cardeña pasaban necesidades: "Ha habido familias con la luz y el agua cortados, mientras que la alcaldesa se dedicaba a hacer corridas de toros", critica.

Con las elecciones, algunas corporaciones que han cambiado de signo político han recibido buenas noticias. En Montemayor, donde gobernaba el PSOE, el nuevo equipo de IU se ha encontrado con que la deuda del municipio es 0 euros. En el 2012, pasaron de deber 216.000 euros a no deber nada. La concejala de Hacienda, Ana María Guijarro, lo tiene claro: "La única receta es no llegar al tope de gasto para que el año siguiente no haya que pagar intereses".