En relación con los delitos económicos, la Fiscalía señala que le resulta "imposible" desempeñar sus funciones, control y coordinación en los mismos términos que en las demás especialidades "por no existir una sección sobre delincuencia económica, careciendo de la figura del delegado correspondiente, y todo ello a pesar del aumento significativo de tales delitos".

En la memoria apunta la existencia de diligencias por delitos contra la Hacienda Pública consistentes fundamentalmente en fraudes en el IVA, impuesto de sociedades e impuestos especiales (sobre el alcohol) y emisión de facturas falsas en el sector industrial de metales, en algunos casos mediante el sistema de las empresas ficticias.

En el sector de la informática, la Fiscalía añade que se continúa con la investigación de los llamados fraudes carrusel, utilizando el procedimiento de la realización de supuestas compras y ventas a través de sociedades interpuestas, todo ello con la finalidad de defraudar a la Hacienda Pública.