LUGAR DE NACIMIENTO CASTRO DEL RIO

EDAD 43 AÑOS

TRAYECTORIA SE INCORPORO EN LA DECADA DE LOS OCHENTA A UNA COOPERATIVA QUE TRABAJABA LA MADERA DEL OLIVO. EN 2004 FUE ELEGIDO PRESIDENTE DE LA ASOCIACION DEL SECTOR

--¿Para qué se creó esta asociación?

--Pues fue un grupo de artesanos de la madera del olivo que vimos que era necesario agruparse para defender nuestro trabajo y dar más proyección a esta actividad.

--Hoy en día, la realidad es que son muy pocos los sitios donde se fabrican muebles de olivo ¿no?

--Muebles de olivo, en el único sitio donde nosotros tengamos referencias, y ya lo hemos buscado por muchos sitios, es en Castro del Río. Luego hay otros lugares, donde se trabaja la madera de olivo pero en otro tipo de artículos, como producto de recuerdo, regalo y adorno.

--¿Cuántas empresas hay actualmente en Castro dedicándose a esta actividad?

--Pues creo que son ocho y dan empleo a unas 30 personas.

--¿Qué volumen de facturación supone la fabricación de muebles de olivo?

--Pues, yo creo que alrededor de los 600.000 euros.

-¿El que haya pocos sitios donde se use esta madera es porque es muy difícil trabajar con ella?

--Fundamentalmente es porque no es costumbre y no conocen la madera del olivo. Por eso en parte se está promocionando ahora desde la asociación de artesanos. Luego, el mueble este no es caro pero tampoco es barato. Es de una gama medio alta y es verdad que esta madera tiene mayor dificultad para trabajarla. De hecho en el mismo pueblo hay algunos carpinteros que prefieren trabajar otras maderas.

--Pero materia prima no falta en esta zona ¿verdad?

--Por el tema de la materia prima no hay que preocuparse, porque la madera que nosotros utilizamos para nuestro trabajo procede la tala de los árboles y en la zona en la que nosotros nos encontramos no hay carencia. Pero sí me gustaría añadir que precisamente la artesanía en madera de olivo es una actividad sostenible, porque no requiere cortar árboles para funcionar, porque como he dicho procede de los trabajos de poda y no se perjudica el medio ambiente.

--El hecho de que sean ustedes tan pocos y en un lugar tan concreto, ¿pone en peligro la evolución del sector de cara al futuro?

--El sector no está en peligro. Está en crisis, como cualquier sector dentro del mueble en general. Pero no hay peligro, conociendo la evolución, que lleva 200 años, y que en todas las empresas hay bastante gente joven que podrá seguir con la actividad.

--¿Dónde se venden los muebles que ustedes fabrican?

--Pues entre la provincia y la comunidad autónoma consumen el 75% de la producción. Lo demás va al resto del país.

--¿Cuáles son los canales de comercialización? Porque siendo un colectivo tan reducido tendrán mayores dificultades...

--Nosotros nos agrupamos, una serie de empresas, para asistir a las ferias de muestras. Hemos ido varios años a Valencia y a Madrid y de ahí han salido relaciones con tiendas y clientes que son los que venden nuestros productos fuera de Andalucía. Aquí lo que funciona es el boca a boca.

--El viernes celebraron ustedes un congreso de artesanos del olivo. ¿Qué se pretendía con ese encuentro?

--Con el congreso lo que buscábamos era ponernos al día de las nuevas tendencias en decoración, diseño en márketing y en comercio exterior. También ha habido un encuentro de fabricantes y artesanos de la madera del olivo de distintos puntos de España donde se han intercambiado experiencias, también se han celebrado mesas redondas donde se ha hablado de varios asuntos de interés para el sector. Por último se ha reconocido a algunas personas que han contribuido a promocionar esta actividad. La idea, en definitiva, es difundir nuestro trabajo con la idea de que se conozca tanto en Córdoba como fuera.

-¿No se han planteado nunca romper las fronteras y saltar al extranjero?

--Hay ya alguna experiencia de alguna empresa que ha vendido algo al extranjero, pero son ventas muy puntuales.

--En ello influirá supongo el hecho de ser empresas pequeñas con una tirada de muebles muy limitada ¿no?

--Sí, hay que tener en cuenta que los talleres artesanales de muebles de olivo son pequeñitos, donde trabajan tres o cuatro personas, y a la hora de la exportación, como no sea uniéndonos y bajo un consorcio de exportación, es complicado.

-¿Cuánto tiempo dura su mandato y cuáles son las cuestiones que le gustaría conseguir?

--Bueno, el mandato es para cuatro años y entre las cosas que tenía como objetivos estaba el congreso. También tenemos conversaciones para crear un museo del olivo en Castro, para que se conozca su historia...

--¿Y cómo va ese proyecto?

--Pues ahora mismo está parado. El año que viene retomaremos la idea para llevarlo a cabo a lo largo del año. Otra cosa que sí llevamos ya algún tiempo trabajando en ello es el centro de interpretación de la madera de olivo. Será un centro bastante importante para los talleres porque se instalará una oficina de diseño y queremos también instalar un secadero para estudiar los comportamientos de la madera.