El Defensor del Pueblo Andaluz y Defensor de la Infancia y Adolescencia de Andalucía, Jesús Maeztu, presentó este viernes en Sevilla la Estrategia 2021-2024 de la institución como un punto de partida para que este comisionado parlamentario adquiera nuevas herramientas y habilidades que le permitan garantizar los derechos ante las nuevas realidades sociales que afronta la ciudadanía.

«Esta estrategia nos permitirá analizar si contamos con los instrumentos necesarios para adaptarnos a los cambios sociales, en permanente transformación, y acometer con valentía esos retos para que nuestro trabajo contribuya a lograr una sociedad más igualitaria y real», destacó Maeztu. Entre estas transformaciones, el Defensor puso como ejemplo el derecho a una buena administración, cada vez más orientada hacia los procesos telemáticos y que comienza a introducir elementos de la inteligencia artificial; el impacto de los procesos migratorios, la despoblación y la crisis demográfica; el compromiso en la lucha contra el cambio climático y la apuesta por una transición energética justa (Agenda 2030), y la preocupación por las enfermedades relacionadas con la salud mental, un fenómeno en aumento, también entre la población infantil y juvenil.

Para Maeztu, «estas realidades no se pueden tratar de la misma manera, se requieren procesos diferentes y un modelo nuevo de mirar y enfocar estos problemas. Compaginar los derechos existentes, los derechos que están por llegar y los nuevos escenarios sociales nos exige herramientas distintas». Por todo ello, el Defensor ha iniciado una «mirada interna» a la institución, «una revisión honesta y valiente cargada de compromiso y responsabilidad con la sociedad en la que nos integramos», con el fin de «dar un salto cualitativo y excepcional que nos permita llevar a cabo nuestra labor: velar y garantizar los derechos y libertades de la ciudadanía».

A preguntas de los periodistas. Jesús Maeztu afirmó que «todavía hay quejas» en la institución por la falta de presencialidad en las consultas de atención primaria, pese a que los centros de salud de Andalucía retomaron la normalidad el pasado 1 de octubre. «Ahora mismo hay quejas porque aún se hacen citas telefónicas, el médico no tiene respuesta presencial y ese es un tema que nos está llegando», manifestó. La normalidad tras la pandemia «está llegando», pero «en primaria aún no se cubren las patologías que eran normales, que no iban por covid» y «hay quejas sobre presencialidad y consulta médica». Aclaró que la Defensoría tiene abierta una queja de oficio sobre la atención primaria ante la crisis sanitaria del covid-19, de la que «estoy esperando los resultados».