La Universidad de Almería (UAL) volvió ayer a la normalidad después que las fuertes lluvias que se registraron el viernes provocaran inundaciones en los aparcamientos y goteras en la biblioteca, los aularios, el laboratorio y en el polideportivo. Así lo han confirmado fuentes de la UAL, que, además, aseguraron que bastó con la ayuda de operarios de la Universidad y técnicos de mantenimiento para reparar los desperfectos que causó el temporal, insistiendo en que "no ha habido que lamentar daños importantes".

Por su parte, el sindicato Frente de Lucha Estudiantil indicó el viernes que los laboratorios ubicados en el edificio CITE IV de la Universidad de Almería se habían visto afectados por el agua, de manera que las goteras hicieron que ordenadores y equipos especializados se mojaran. De hecho, difundieron varias imágenes de investigadores tratando de achicar agua y poner a salvo los equipos.

Además, la fuerte tromba de agua caída en Almería provocó la inundación del servicio de urgencias de atención primaria ubicado en el Centro de Alta Resolución de Especialidades (CARE) de la Bola Azul y otras incidencias, de menor importancia, en el Hospital Torrecárdenas, fundamentalmente en el Hospital de Día Oncológico, donde algunos pacientes tuvieron que ser reubicados, sin que fuera sido necesario interrumpir los tratamientos. En este caso, los servicios de mantenimiento y limpieza del propio centro resolvieron el mismo viernes las incidencias.