Sonriendo y abrazado a su abogado y a su hija. Así salió anoche de prisión el exdirector general de Trabajo y Seguridad Social de la Junta de Andalucía Francisco Javier Guerrero, imputado en la causa de los expedientes de regulación de empleo (ERE) fraudulentos. Abandonó la cárcel de Sevilla-I, donde ha estado interno desde el pasado día 10 de marzo, pasadas las 22.00 horas de ayer y dijo estar "muy contento y muy tranquilo" después de pagar la fianza de 50.000 euros fijada por el Juzgado de Instrucción número 6.

Tras salir de prisión y saludar con un fuerte abrazo a su hija, a la que se ha referido como su "tesorito", y a su letrado, ha atendido a la quincena de periodistas que los esperaban a las puertas de Sevilla-I y ha bromeado señalando que "no me han dejado salir antes", añadiendo que "me da mucha alegría veros", aunque "en otros momentos ya sabéis que casi os huía".

"Estoy muy contento y muy tranquilo, creo que no he cambiado, ¿me véis igual?, entonces es que no me han tratado muy mal ahí adentro", ha señalado Francisco Javier Guerrero, quien también ha aseverado que, para una experiencia como la de estar en prisión "uno nunca está preparado, pero aún no estando preparado, uno tiene que aceptar todo lo que le viene con deportividad, dignidad y humildad; así entré y así salgo".

Tras ser cuestionado por el hecho de que sea el último imputado por el caso ERE que permanecía en prisión, tras salir en libertad su exchófer Juan Francisco Trujillo y el exconsejero de Empleo de la Junta Antonio Fernández, Guerrero ha sido escueto y ha señalado que "a alguien le tiene que tocar, y me ha tocado a mí".

Asimismo, y sobre sus perspectivas de futuro, ha dicho que ahora "veré cómo es mi casa y mi calle", aunque "no me dedicaré a buscar trabajo, sino a retomar todo lo que estaba intentando hacer antes de entrar aquí", e incluso ha emplazado a los periodistas para más adelante "para hablar con más tranquilidad y contar cosas anecdóticas y curiosas" sobre su experiencia.

FALSOS AMIGOS El imputado, que ha querido "mandar un saludo a mi gente del módulo 3, con los que he estado bien porque me han hecho la vida feliz", ha dicho estar agradecido "a muchísima gente". No obstante, "hay una cosa que no se me va a olvidar en la vida, y es que dicen que las crisis sirven para que desaparezcan los falsos amigos, con lo cual estoy encantado de que hayan desaparecido un montón".

De su lado, su letrado, Fernando de Pablo, ha explicado a los periodistas que la fianza se ha podido pagar gracias a la ayuda de familiares y amigos, ya que, "aunque se rebajó la cantidad, hemos estado cinco largos días" intentando reunir el dinero, y con independencia de que se haya conseguido, recurrirán ante la Audiencia Provincial porque "no es justa". Fue ayer por la tarde cuando consiguieron reunir los 50.000 euros de la fianza fijada por el juez sustituto del Juzgado de Instrucción número 6, Iván Escalera, y entregarlos en el Juzgado de Guardia, lo que posibilitó que el imputado saliera de prisión a final del día. Su fianza se ha ido rebajando desde los 250.000 euros impuestos el pasado verano por la jueza Alaya hasta los 50.000 euros de la semana pasada.