ACTO DE PRESENTACIÓN

La cooperativa Virgen de Araceli de Lucena presenta sus dos primeros aceites propios

Se comercializarán con los nombres Pagos de Aras y Araceli

Acto de presentación de los dos aceites de la cooperativa Virgen de Araceli.

Acto de presentación de los dos aceites de la cooperativa Virgen de Araceli. / Manuel González

La Cooperativa Olivarera Nuestra Señora de Araceli de Lucena, avalada por seis décadas de trayectoria, ha patentado sus dos primeros aceites propios. Esta entidad agraria permanece integrada en Dcoop, un grupo multisectorial líder mundial en envasado y venta de aceite de oliva.

La aspiración estratégica de lograr una identidad singular y una imagen distintiva cristalizan en dos productos –ambos de la variedad hojiblanca- estrechamente ligados, por su denominación y etiquetado, a la Sierra de Aras y a la Patrona de Lucena, advocación mariana que designa a esta sociedad instalada en el Parque Empresarial Príncipe Felipe. 

El aceite ‘Pagos de Aras’ representa la “calidad excelente” del aceite de oliva virgen extra, desde su primera extracción, ha manifestado el presidente de la cooperativa, Antonio Aguilera, en el Salón de los Espejos del Círculo Lucentino. Una modalidad “premium y gourmet”, abundó el gerente, Bernardo Muñoz. De esta cosecha, han sido embotelladas dos mil botellas, amparadas y certificadas por la DO Aceite de Lucena. 

Más de mil socios activos y otros 800 en un régimen de colaboración componen esta cooperativa. Junto al 'Pago de Aras’, emplazado en un nivel superior como un “buque insignia” y que combina sabores y olores afrutados, nace el aceite ‘Araceli’, concebido desde “la frescura y la pureza” del “día a día”, sintetizaba Aguilera, para un consumo habitual en la cocina. 

El presidente de Dcoop, Antonio Luque, remarcaba la relevancia de combinar los aceites individualizados con la posibilidad de una introducción colectiva, a través de esta empresa agroalimentaria, “en todos los lineales del mundo”. Finalmente, aludió “al gran problema del agua” que provoca unos precios más altos. 

En último lugar, el alcalde, Aurelio Fernández, expresó que “este proyecto fantástico” favorece “el refuerzo de la presencia” en el sector oleícola.