"Empiezas a sacar facturas y te acaba diciendo la interventora: ¿Todo esto cuesta una caseta? ¡Y vaya si cuesta!" resumía ayer en El Arenal Francisco Castillero, presidente de la Federación de Peñas, entidad cuya caseta, una de las mayores de la Feria, puede costar montarla este año más de 40.000 euros.
Y es que los ingresos serán muchos, pero una caseta sale por una pasta gansa . De hecho, a la carpa más modesta en la parcela más pequeña no le quita nadie los 18.000 euros de gasto mínimo, sin ninguna inversión que sirva para años sucesivos y sin contar la gestión de la barra.
Una caseta, un mundo
Pero, entre los 18.000 de una caseta modesta y los más de 50.000 que destinan algunas grandes carpas hay todo un mundo. O mejor dicho, 113 mundos, los de las casetas de los 108 colectivos, las cuatro discocasetas y la carpa Municipal. Cada colectivo escoge un modelo de gestión para hacer frente al montaje y a la explotación de la caseta, aunque lo más fácil y habitual (y por otra parte, oficialmente prohibido), es que el colectivo concesionario ceda toda la responsabilidad al que gestiona la barra, todo ello a cambio de que corra con los gastos, una comida gratis para los socios y algún dinero (a veces, ni eso).
En el lado contrario a este modelo está una decena de cofradías que, gracias al trabajo de sus voluntarios, hacen rentable la caseta. Eso sí, destinan también mucho dinero a material (carpas, menaje, mobiliario, decoración, etcétera), con lo que abaratan al año siguiente el montaje de su caseta, pero a costa de invertir a veces en la Feria más que en Semana Santa.
Si seguimos el ejemplo del gráfico (el de una caseta de 300 metros muy modesta) y suponemos que se cede la explotación de la caseta a un profesional de la hostelería, éste también deberá sumar al gasto de personal y preventistas los 21.400 euros mínimos del montaje. "Hay mucho en juego en la Feria. Hablamos de muchos negocios, de miles de salarios por horas de trabajo", recordaba ayer Juan Antonio Merlos, presidente de la Asociación de Casetas Tradicionales. Y es cierto. En esta hipotética caseta a la que le llevamos las cuentas, con tan solo cuatro camareros y dos cocineros de media a lo largo de jornadas de 14 horas los 9 días, el coste de personal a 10 euros la hora es más de 7.500 euros.
Ahora, la pregunta es, ¿cuántos tubos de cerveza hay que vender para hacer frente a los cerca de 30.000 euros de inversión, sin contar proveedores, de esta caseta? Pues bien, sabiendo que el margen es de que cada barril de cerveza da 160 tubos y su coste, junto al de la botella de carbónico es de 80 euros, el margen, vendiendo la cerveza a 2 euros, es de 1,5. Respuesta: 20.000 tubos para cubrir gastos.
Por eso, si llueve a lo largo de uno de los dos fines de semana de la Feria, el desastre económico es casi seguro. A menos que al año siguiente se ponga algo que no tiene precio: mucha ilusión y mucha fe en la Feria.
