La Guardia Civil intervino en Melilla más de 109 kilos de angulas vivas que habían llegado a la ciudad autónoma escondidas en el equipaje de un pasajero de un buque procedente de Almería, metidas en bolsas de agua que, a su vez, estaban en el interior de maletas, bolsos de viaje y un arcón.

La Comandancia de la Guardia Civil de Melilla informó de que los hechos ocurrieron el viernes, cuando agentes de la Sección Fiscal del Muelle registraron un vehículo que desembarcaba del buque que transportaba las angulas en la zona de carga y de forma oculta en el interior de diversas maletas y bolsos de viaje. Tras abrir el equipaje, el instituto armado comprobó que las angulas iban introducidas en multitud de bolsas de plástico de un kilogramo de peso cada una de ellas, acondicionadas entre botellas de hielo para mantener la temperatura necesaria y evitar su muerte. El valor de la mercancía intervenida ronda los 200.000 euros, ya que la población de anguila europea (Anguilla anguilla) está protegida y la Unión Europea ha fijado una cota cero para la importación o exportación de esta especie al haber sufrido un dramático descenso por la pérdida de su hábitat natural y la pesca ilegal.

Es la primera vez que se intervienen en Melilla angulas vivas procedentes de la península y en una cantidad tan grande. Se desconoce la procedencia de las halladas en el puerto de la ciudad autónoma. Los animales intervenidos partieron pocas horas después de su llegada a Melilla en otro buque con destino a la península para trasladarlas a un centro especializado, donde les realizarán pruebas de ADN que puedan determinar su procedencia y su estado.

La Guardia Civil detuvo al conductor del vehículo intervenido donde iban escondidas las angulas. Se trata de un ciudadano de nacionalidad marroquí, con residencia legal en la provincia de Almería, de 42 años, que pasó a disposición judicial en calidad de detenido como supuesto autor de un delito de contrabando.