A la señora alcaldesa de Córdoba: Somos un matrimonio de 81 y 79 años de edad, que todas las mañanas sale de casa a desayunar a una cafetería cercana a nuestro domicilio de la barriada de Fray Albino. Y es de vergüenza cómo está el barrio de sucio. Nos encontramos totalmente marginados por su poca o ninguna vigilancia municipal. Las cacas de perro están por todas las aceras. Los coches, con cierta asiduidad, ocupan las aceras y tenemos que andar por la calzada largos trayectos, con el peligro que eso supone a nuestra edad. La limpieza brilla por su ausencia y ahora tenemos el grave problema de las caídas de las naranjas. Y pronuncio la palabra grave, por que estando mi esposa con una prótesis de cadera, y las dos rodillas también con prótesis, tenemos que ir sorteando las puñeteras naranjitas por temor a pisarlas y que nos fastidiemos aún más. Por tanto le pido, mande al personal competente, lo antes que pueda, y que recojan dicho fruto que está esparcido y arrollado en la calzada y encima de las aceras, por todas las calles de la barriada, pero con el mismo celo con que ha mandado a realizar dicho trabajo en el Patio de la Mezquita o en las Tendillas.

<b>Antonio Rodríguez Salido</b>

Córdoba