La campeona olímpica de maratón en los Juegos de Río dio positivo de EPO (eritropoyetina) en un control fuera de competición en su país, Kenia. La fondista también ganó en el 2016 el maratón de Londres. La Federación Internacional de Atletismo abre a la atleta un caso de infracción del reglamento antidopaje.
