Ha llegado el momento de hacer balance de la gestión desarrollada durante los últimos años en el Ayuntamiento de Córdoba. No pretendo calificarla, pero creo que es necesario describirla y ordenarla para luego extraer algunas conclusiones.
Nuestro proyecto era sencillo, corregir las deficiencias más graves que sufría la institución y, por ende, la ciudad: reestructuración financiera, acabando con el caos y el despilfarro existente; mejora de la gestión para ser más eficientes y transparentes; reducción de gastos superfluos para garantizar los necesarios y justos; mejorar la habitabilidad en cada barrio; replantear las grandes inversiones para hacerlas viables; y fortalecer los sectores económicos clave para salir de la crisis y generar empleo.
Pero tenerlo claro no fue igual a tenerlo fácil. La debilidad de la economía municipal era mucho mayor de lo que decían los datos oficiales. Desde el gobierno asumimos el problema, no buscamos excusas y pasamos a la acción. Hoy, por primera vez en muchos años, el Ayuntamiento está saneado. Se ha reducido la deuda en más de 35 millones de euros; ha pasado de pagar en 268 días a pagar en 12 días de media a nuestros proveedores... y, además, se han bajado los impuestos por primera vez en la democracia. No iré al detalle, pero debo decir que la coordinación y lealtad de un gobierno unido y sólido ha permitido rentabilizar esfuerzos y, sobretodo, acometer programas de eficiencia y medidas de apoyo a quienes más lo necesitan.
El Ayuntamiento llevaba muchos años sin atender las demandas de los barrios. Por ello prometimos realizar las 50 obras que acordasen los colectivos de cada uno de nuestros 50 barrios. Hoy puedo decir que se ha multiplicado por tres lo previsto, lo que ha permitido, junto al Córdoba Vivienda, activar un sector clave para el empleo: la construcción.
Prometimos acabar con la disparatada gestión de los grandes proyectos. Hoy se está adjudicando el Centro de Exposiciones, Ferias y Convenciones (CEFC). Logramos activar el Metrotrén, un proyecto de bajo coste y de gran impacto que conseguirá conectar Villarrubia, El Higuerón, Estación Central, Rabanales y Alcolea con 19 frecuencias diarias; y ya está en marcha la Biblioteca Pública del Estado.
El turismo era y es un arma importante. Siempre apostamos por él y, con el apoyo del sector, se han logrado los mejores datos turísticos de nuestra historia. Tampoco olvidamos a nuestro sector exportador, fundamentalmente el metal, la joyería y el agroalimentario, con unos resultados francamente positivos, hasta el punto de ser la provincia andaluza con mejor balance comercial en los últimos años. Y, por último, la apuesta del sector médico cada vez está más cerca de ser una realidad. En estos momentos se están tramitando tres iniciativas de hospital privado en nuestra ciudad.
En definitiva, hay un proyecto claro de ciudad de progreso, de ciudad moderna, de ciudad habitable, segura, competitiva e inclusiva. Un proyecto que ha nacido del esfuerzo de una sociedad que ha sacado lo mejor que tenía dentro para vencer a la crisis y lo está logrando. Un proyecto que no puede verse truncado en este momento.
Prometí no volver a ser candidato si no lográbamos que ese cambio fuese por y para el empleo de los cordobeses. Llegamos a una ciudad que destruía casi nueve empleos al día y hoy, desde que pudimos aplicar nuestro programa, se crean más de ocho empleos diarios sumando el período más largo de mejoría del paro de la historia: 16 meses seguidos. El impulso al empleo ha sido tal que, en el último dato de EPA, ya queda acreditado que hay menos parados que cuando llegamos al gobierno.
No creo en los personalismos, por ello he querido saber si mis compañeros de gobierno y los afiliados de mi partido creían que debía seguir otros cuatro años al frente del nuestro. Tras valorar el trabajo realizado, confirmar su efecto positivo en el empleo y oír a mis compañeros, quiero trasladar a la sociedad de Córdoba mi decisión de seguir trabajando por consolidar el cambio que nuestra ciudad necesita y, si el comité electoral lo decide, encabezar la candidatura del Partido Popular el próximo 24 de mayo, donde los ciudadanos valorarán si esa gestión merece mantener o no su confianza.
* Alcalde de Córdoba
