La candidatura de la ciudad palatina de Medina Azahara a convertirse en Patrimonio de la Humanidad avanza con paso firme, subiendo un escalón más hacia el título con el informe favorable y positivo realizado por el evaluador de la Unesco Atillio Petruccioli, que analizó y estudió el yacimiento durante tres días a finales de septiembre, y cuyo resultado se ha dado a conocer recientemente al Ministerio de Cultura en París, según ha podido saber este periódico. Por otro lado, la decisión final, prevista en julio del 2018, se conocerá en Baréin, un Estado soberano insular asiático situado en la costa este del golfo Pérsico, lo que podría suponer una ayuda extra para Medina Azahara.

La visita de Petrucciolli, profesor de Arquitectura Paisajística y decano de la Escuela de Arquitectura de la Universidad Politécnica de Bari (Italia), era una de las pruebas más decisivas para el yacimiento cordobés en su camino a convertirse en Patrimonio de la Humanidad, ya que el experto tenía como cometido realizar un profundo examen del que la ciudad palatina ha salido airosa. Durante su visita se evidenció la unidad y colaboración institucional que existe en Córdoba en torno al reto del yacimiento, que Petruccioli recorrió junto al grupo de arqueólogos y expertos que forman la comisión técnica estable, con los que el evaluador de la Unesco trabajó intensamente.

Durante su estancia en Córdoba, el experto mantuvo reuniones a puerta cerrada y en medio de una gran discreción con la comisión técnica estable y también se entrevistó con especialistas en Medina Azahara, tanto del ámbito nacional como internacional. La gestión y el estado de conservación y recuperación del yacimiento fueron algunos de los aspectos que analizó Petruccioli, así como el tipo de infraestructuras complementarias de las que goza, la conexión con el centro de recepción de visitantes y la propia ciudad, las actuaciones que se están llevando a cabo o aspectos relacionados con el paisaje, analizando de forma integral los restos arqueológicos que aspiran a convertirse en Patrimonio de la Humanidad. En relación al proyecto de restauración del Salón Rico de Medina Azahara también se ha dado un importante paso con el apoyo por parte de la World Monument Foundation, que permitirá que el proyecto continúe avanzando.

La universalidad y excepcionalidad de Medina Azahara son sus bazas más importantes a la hora de alzarse con el título, ya que se trata del único ejemplo conservado de una ciudad de esas características dentro del ámbito europeo, y aun de ese periodo histórico en el conjunto de la cultura islámica.

Por otro lado, el yacimiento aporta un testimonio excepcional de la desaparecida civilización islámica andalusí y constituye un ejemplo único de su época más floreciente, lo que lo convierten en un objeto único de investigación histórica sobre ese periodo.