La Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía ha creado una comisión destinada a evaluar y analizar la colección Circa XX, de Pilar Citoler, cuyas conclusiones pueden ser definitivas para que las obras de arte contemporáneo se ubiquen o no finalmente en Córdoba, un deseo que la coleccionista ha expresado reiteradamente a lo largo de los últimos cinco años. Presidida por Pepe Girao, la comisión, que tendrá su segunda reunión en Córdoba el próximo día 14, está integrada por los artistas, críticos de arte y gestores Mercedes Mudarra, Juan Cuenca, Jesús Alcaide, Tete Alvarez, Francisco Domínguez, Yolanda Romero, Estrella de Diego, Mar Villaespesa, Juan Antonio Alvarez Reyes y Elisa Torrent.

Este grupo se reunió por primera vez a finales del mes de julio y nada ha trascendido oficialmente sobre las primeras conclusiones a las que se llegó, aunque entre este absoluto mutismo tanto de la Junta como de los miembros de la comisión ante la petición de explicaciones alguno de sus integrantes ha manifestado que el objetivo de esta comisión es valorar hasta qué punto la colección Circa XX es interesante para Córdoba en función de las condiciones que impone la propietaria, expuestas en un protocolo general de intenciones firmado por ella y la Universidad de Córdoba, que fue remitido a las distintas instituciones y cuya vigencia se extiende hasta el 15 de junio del 2012.

Por otra parte, los miembros de la comisión esperan analizar más documentos y tener una valoración económica y artística de la obra para poder pronunciarse y, aunque la casa de arte Fernando Durán de Madrid ha valorado recientemente la colección en diez millones de euros, la Junta quiere contrastar esa tasación.

Pese a que todas las instituciones han manifestado su deseo de que la colección se ubique en Córdoba, incluso proponiendo lugares alternativos al C4 (el idóneo a juicio de la coleccionista), todavía no ha habido ninguna reunión expresa con Citoler, que está dispuesta a "negociar" sus condiciones. En este sentido, fuentes de la Universidad consideran que el protocolo es "un documento para el diálogo", algo que no "aún no ha tenido lugar", y, aunque reconocen que el consejero Paulino Plata ha dado algunos pasos, consideran que es necesario acelerar el proceso, sentarse a negociar y tomar decisiones. Estos mismos deseos son los que expresa la coleccionista, que afirma que si comienzan las negociaciones y, "si hay buenas intenciones", no le importaría ampliar la vigencia del convenio.

A LA ESPERA Mientras tanto, la coleccionista sigue a la espera de una próxima reunión con la Universidad para hacer un programa de actuación y reitera su interés en que la colección se ubique en el Centro de Creación Contemporánea (C4), "porque es lo más práctico y económico, ya que está casi acabado y, de momento, se podría compartir ese espacio con la creación hasta que se determine otro lugar". Tras un "largo camino recorrido que se inicia por el interés de la Universidad de Córdoba", Citoler sigue teniendo esperanzas de que su colección se ubique finalmente en esta ciudad "porque hay mucha gente interesada y creo que Córdoba, en general, desea que se realice este proyecto", concluye la coleccionista.