Participación ciudadana, sí, pero no en forma de consulta o referéndum. El teniente de alcalde de Presidencia, Emilio Aumente (PSOE), fue explícito ayer al rechazar la celebración de un referéndum sobre los nombres del callejero franquista que, bien por su arraigo popular, bien por los matices del personaje histórico en cuestión, han suscitado el debate. En este sentido, los socialistas coinciden con su socio de gobierno, IU, que ya había rechazado esa fórmula propuesta por el PP para las calles Cruz Conde, la plaza de Cañero y la avenida del Conde de Vallellano. También, con Ganemos, que consideraría «una jugarreta» la realización de una consulta, que serviría, a su juicio, «para dilatar la actuación y no asumir la responsabilidad de acatar una ley que viene a restablecer unos mínimos de convivencia, de libertad, justicia y democracia previos al 36». El portavoz de esta formación, Rafael Blázquez, afirma «que sentaría un pésimo precedente que el primer referéndum que se haga en la ciudad sea para decidir si aplicamos o no la ley».

Con sus declaraciones, Aumente aclaró las dudas que suscitaron las palabras de la alcaldesa, Isabel Ambrosio, sobre la cuestión de la consulta. «La alcaldesa no ha hablado de hacer un referéndum y sí de que haya participación ciudadana», apostilló y, como ella, abogó por lograr «fórmulas de consenso» antes de que el dictamen se eleve al Pleno, que es quien tendrá la última palabra sobre el dictamen de la comisión de la Memoria Histórica.

El teniente alcalde de Presidencia insistió en que «hay que acatar la ley y cumplirla, pero hay fórmulas de acatarla buscando un consenso con todos los grupos» e indicó que eso es lo que «hay que intentar como equipo de gobierno, para llegar a un acuerdo plenario donde todos estén de acuerdo». En suma, Aumente consideró que «hay muchas fórmulas de cumplir la ley y a lo mejor no cambiar nombres». Por ejemplo, propuso renombrar la avenida del Conde de Vallellano por Vallellano a secas.

Por su parte, la teniente de alcalde de Participación Ciudadana y Hacienda, Alba Doblas (IU), negó que existan «diferencias» entre IU y PSOE en esta cuestión, pero a continuación afirmó que serán «radicales» en la aplicación de la ley y en la ejecución del dictamen de la comisión, que incluye la eliminación del nombre de un total de 15 calles. Ni una más, ni una menos. «En la aplicación de la ley vamos a ser absolutamente radicales y para el nombre que se vaya a dar a las calles, como es tradición en la ciudad, habrá todo el proceso participativo que se considere oportuno». En esta línea, Doblas afirmó que «está claro que se va a contar con la participación ciudadana». Además, añadió que la misma ley andaluza de Memoria Democrática fue «absolutamente participada» y que «como está en vigor hay que cumplirla y que la comisión ha hecho una propuesta en ese sentido».