El ministerio público ha solicitado una pena de cuatro años y seis meses de prisión, así como una multa de 600 euros, a un acusado de meter en el centro penitenciario de Alcolea cuatro bellotas de hachís para su distribución. Según el escrito del fiscal, el hombre, aprovechando una salida programada de la cárcel, donde cumplía condena, adquirió cuatro bellotas de hachís, que consiguió introducir en el centro penitenciario sin ser descubierto. Ante las sospechas de que pudiera haber metido droga, los funcionarios lo sometieron a un cacheo en su celda, donde se le encontraron 43 gramos de resina de hachís ocultos en un paquete de tabaco de liar. La droga intervenida pertenecía al acusado y estaba destinada, según el fiscal, a ser facilitada a terceros para su consumo en el interior del centro penitenciario. El ministerio público lo acusa de un delito contra la salud pública.