La asamblea de evaluación del año de actividad de los concejales de Ganemos Córdoba en el Ayuntamiento de la ciudad, y a pesar de que inicialmente no estaba en el orden del día, reabrió ayer el debate sobre «la conveniencia o no de entrar en el gobierno» local, una invitación que ya formuló hace un año la alcaldesa de Córdoba, la socialista Isabel Ambrosio, y que, en un principio, la asamblea de Ganemos rechazó aunque dejando abierta la puerta a futuras negociaciones.

A nadie se le ocultaba ayer que la situación política ha cambiado, especialmente a nivel nacional, donde Izquierda Unida y Podemos van de la mano a las próximas Elecciones Generales mientras que en el Consistorio cordobés los grupos del PSOE y de IU gobiernan con, ocasionalmente, Ganemos Córdoba haciendo oposición, también a sus aliados a nivel nacional.

Sin embargo, la decisión no será de un día para otro. La exconcejala María José Moruno, coportavoz de la asamblea, dijo que la propuesta será «motivo de reflexión» en las próximas semanas y en una asamblea específica. «Nosotros no estamos en posturas extremas de sí al gobierno (local) o no, sino de apertura, y en este año hemos aprendido que hay que reconsiderar las posturas», dijo Moruno.

En todo caso, e independientemente de que Ganemos decida incorporarse al gobierno local o no, la asamblea de ayer, celebrada en el patio de una de las participantes en el proyecto (en la casa de Cristina Bendala, en plaza de las Tazas 11), sí llegó a un acuerdo mínimo: hay que discutir la cuestión. «Ha habido un consenso muy grande en que este debate se tiene que hacer con la culminación de un proceso de evaluación interna», todo ello para que el acuerdo que se tome tenga el mayor respaldo posible, explicó el otro coportavoz de la asamblea, el también concejal y portavoz del grupo municipal de Ganemos Córdoba, Rafael Blázquez.

Capítulo aparte, la asamblea de ayer, con una participación muy distante a los multitudinarios encuentros que dieron origen a esta iniciativa política local, hizo balance del primer año de trabajo de sus concejales en el Ayuntamiento y, en general, de la labor de la formación.

Al respecto, María José Moruno destacó la necesidad de profundizar en la estrategia política a través de dos vías: «armonizar a todas las personas adheridas a Ganemos Córdoba con la labor que desarrollan los concejales» y, paralelamente, reforzar «los cauces de participación».

En todo caso, y según la coportavoz Moruno, «los concejales han actuado con una dignidad, una ejemplaridad y una capacidad transformadora de las políticas municipales alejada del mimetismo de las antiguas formas de hacer política». Eso sí, no faltó en la asamblea alguna crítica, más o menos velada, a los resultados transformadores logrados por Ganemos Córdoba en la ciudad.

También se hizo balance del trabajo en la Diputación de Córdoba, donde Ganemos Córdoba tiene representación de manos de María Ángeles Aguilera, consensuándose que «se siga trabajando» en confluir con distintas candidaturas municipalistas de la provincia.