El sindicato mayoritario del sector de prisiones, Acaip, ha organizado durante esta semana cuatro días de movilizaciones por parte de los trabajadores de instituciones penitenciarias a nivel nacional. En concreto, se han programado manifestaciones frente a las puertas de todas las subdelegaciones del Gobierno en todas las provincias de España para denunciar la «gran desprotección» que sufre este colectivo de trabajadores en sus puestos de trabajo. En concreto, ayer se celebraron manifestaciones en Andalucía y Galicia y, de acuerdo a lo previsto, se realizó una concentración ante la puerta de la subdelegación del Gobierno de Córdoba, donde los manifestantes regalaron chorizos a las personas que pasaron por allí y también repartieron documentación informativa sobre su situación.

José Miguel Sánchez, delegado sindical de Acaip en Córdoba, explicó a este periódico que «los empleados públicos de prisiones estamos en una situación caótica, al borde del colapso», haciendo referencia a los dos principales problemas que desde el sindicato afirman tener, que son «el grave número de agresiones que sufrimos y la falta de personal en los centros», según detalló Sánchez. Frente a esta problemática, Acaip pide que se les aplique a los trabajadores de las prisiones la condición de agentes de la autoridad, lo cual, según argumentó Sánchez, «endurecería las penas frente a las agresiones y actuaría como elemento disuasorio», además de la incorporación de nuevo personal, ya que, según los cálculos de Acaip sobre la situación, harían falta cerca de 3.500 trabajadores más en España. En lo referente a Córdoba, Sánchez especificó que, en los últimos seis años, se han registrado más de 50 agresiones a funcionarios penitenciarios.

Asimismo, desde Acaip han señalado que «con esta manifestación queremos denunciar la pésima gestión y la falta de compromiso y de rigor del actual secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Yuste, y su equipo de trabajo».