Una semana después de ingresar en prisión, el cordobés Carlos Cano, uno de los dos simpatizantes del 15M condenados a tres años y un día de cárcel por su participación en un piquete informativo en Granada durante la huelga del 2012, abandonó ayer, poco antes de las 15.30 horas, la cárcel de Albolote después de que la Audiencia de Granada suspendiera cautelarmente la ejecución de la pena, según fuentes judiciales. A Cano, natural de Castro del Río y recién licenciado en Medicina, lo esperaban en la puerta de la cárcel algunos familiares y miembros del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), que ayer acababan de iniciar una huelga de hambre ante el centro penitenciario en protesta por la pena impuesta tanto al joven cordobés como a Carmen Bajo, la otra condenada.

Carlos Cano dijo a Europa Press que "lo peor" de prisión es "no saber cuándo vas a salir". Cano señaló que la cárcel "no deja indiferente" a nadie, y, aunque afirmó que ha pasado "un momento difícil", agradeció el apoyo que ha recibido de los internos y funcionarios. "Mucha gente me ha dicho dentro que conmigo se estaba cometiendo una injusticia y que la condena era una barbaridad, y he recibido mucha ayuda. Yo no quería que esto me afectase y ese apoyo me ha servido de mucho", indicó el joven. El joven condenado agradeció el apoyo recibido fuera e indicó que para él había sido una alegría "encontrarse, cuando ha salido de prisión, al SAT". Cano ha dado también las gracias al 15M. "He percibido en la cárcel que nada depende de ti, estás a merced de lo que te ocurra, y notas eso de que los pobres no salen y los ricos no entran", resaltó. En lo que respecta a su petición de indulto y preguntado por si confía en que el Gobierno le conceda esa medida, Cano sostuvo que él en quien confía es "en la gente". "Yo no quiero esperar nada de la institución, entiendo que sería lo justo, como entiende mucha gente, pero yo lo único que puedo esperar es que la gente va a seguir ahí, y que no se va a callar hasta que se haga justicia", concluyó.

La puesta en libertad de Cano se produjo ayer después de que la Audiencia de Granada decretase la suspensión de la ejecución de su pena hasta la resolución del indulto solicitado, una medida a la que también tiene intención de acogerse Carmen Bajo, a quien le fue concedido el aplazamiento de entrada en prisión hasta el 31 de julio.

Carlos Cano fue condenado a tres años de cárcel y un día por un delito contra el derecho de los trabajadores por su participación en un piquete informativo en la huelga general de marzo del 2012 en Granada. Cano está pendiente de un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional (TC), en el que reclama medidas cautelares de suspensión de la ejecución de su condena hasta finalizar el tramite de petición de indulto, solicitado al Ministerio de Justicia.

REACCIONES Los padres de Carlos Cano, Pedro y María Félix, se mostraron ayer emocionados, pero cautos, ante la salida de la cárcel de su hijo, pues "aún queda mucho camino hasta la resolución del recurso de amparo y del tema del indulto". Por otro lado, la plataforma de Castro del Río en apoyo a Carlos y Carmen entregará hoy a Carmen Bajo la cantidad de 1.750 euros, recaudados a través de concentraciones y sorteo de regalos donados por particulares, "dinero con el que quieren ayudar a resolver la delicada economía de la otra condenada en este juicio".