En la reunión, el presidente de la Junta también puso sobre la mesa otra reclamación al Estado, en este caso, la cesión de la titularidad de varios inmuebles adscritos a la Seguridad Social, principalmente edificios hospitalarios, y cuya gestión ya corresponde a la comunidad autónoma. Se trata de los hospitales, como el Virgen del Rocío de Sevilla, que ya existían cuando la comunidad recibió, en 1984, la transferencia de las competencias sobre Sanidad. En ese momento, la gestión -y con ella el mantenimiento y uso de los mismos- pasó al Gobierno autonómico, pero el Estado conserva la titularidad sobre los inmuebles.

El pasado junio, el Gobierno central reformó la Ley de Seguridad Social para permitir a las comunidades autónomas reclamar estos inmuebles, atendiendo así a una histórica petición de Cataluña pero abriendo la posibilidad a otras las regiones para evitar acusaciones de agravios. De hecho, la Comisión Bilateral entre el Gobierno y la Generalitat ya ha acordado la cesión de siete hospitales catalanes y la sede del Instituto Catalán de la Salud. El objetivo de la Generalitat es hacer caja con la venta o alquiler de algunos de esos inmuebles, cuyo valor estima en 1.200 millones de euros.

Fuentes de la Junta negaron ayer que esa sea su intención, ya que son edificios que mantienen su uso sanitario. Ni siquiera para incluirlos en la oferta de inmuebles para su venta y posterior arrendamiento por la Junta. Su objetivo, dicen, es aumentar el patrimonio del Ejecutivo andaluz como valor para futuros avales. Griñán reconoció ayer que la suma de estos edificios comportan "un valor patrimonial importante que pasaría a manos de la Junta de Andalucía".