La calle Cruz Conde quedará totalmente cerrada al tráfico a partir del día 17 de enero y hasta que acaben las obras. De esa forma empezará una nueva fase de los trabajos, que afectará al tramo de vía que va desde Conde de Robledo a Ronda de Los Tejares, donde se desmontará el alquitrán y se colocará el nuevo pavimento al igual que se está haciendo en el que hay entre Las Tendillas y Conde de Robledo. La gran novedad es que el tráfico de los aparcamientos de Hacienda y de Edaco no se desviará por el tramo que se está arreglando ahora de Cruz Conde, como estaba previsto. Lo que ocurrirá es que los usuarios del párking de Edaco, ubicado en Conde de Robledo, no saldrán por Cruz Conde si no que lo harán por la calle Góngora, desembocando en el bulevar, que tendrán que cruzar, al igual que los de la cochera de Hacienda, para buscar la salida a Ronda de los Tejares por la acera contraria --la del BBVA y Cajasur-- a la que ahora utilizan para entrar en la calle Conde de Robledo. Para ello, y según explicó ayer el portavoz de IU y presidente de la Gerencia de Urbanismo, Francisco Tejada, se colocarán unas chapas que protegerán el pavimento. Este cambio de planes se debe a que "no se asentarían bien los adoquines" recién colocados en Cruz Conde si los pisan los coches.
Pero este no es el único cambio previsto. El Ayuntamiento cortará este domingo el tráfico en Las Tendillas, concretamente entre Diego León y Cruz Conde. La razón es que la empresa encargada de las obras de la calle Cruz Conde, la UTE formada por Ros Zapata y Acsur, va a iniciar el arreglo del pavimento de esa parte, que es una de las mejoras que introdujo en el proceso de adjudicación. Este corte de tráfico supondrá que los residentes, la carga y descarga, y los que tengan cocheras en el entorno de la calle Málaga--Sevilla, tendrán que salir por las calles Barroso, Angel de Saavedra, plaza de la Compañía y Duque de Hornachuelos, único tramo de Tendillas que quedará con tráfico y desde donde podrán tomar Diego León para bajar por Afonso XIII hacia Capitulares y San Fernando. Durante el tiempo que dure este corte, estimado en dos meses, la pilona de Barroso permanecerá bajada para permitir la circulación. Además, las calles Málaga y Sevilla quedarán como fondo de saco con entrada y salida desde la plaza de San Juan .
Otra novedad es que no será hasta el 31 de enero cuando la UTE empiece a trabajar en los acerados de la calle Cruz Conde, tarea que comenzará en la zona próxima a Las Tendillas y continuará "ininterrumpidamente" hasta el final, según explicó Tejada. Cuando eso ocurra, los peatones irán por el centro de la calle. Tejada dejó claro que todos estos pasos son "acuerdos adoptados en la mesa de seguimiento" de las obras, en la que está presente el comercio.
