Joaquín Salas y Rafael Aranda son dos de los socios fundadores de la cooperativa DTI2, una empresa dedicada a la informática de sistemas y a las telecomunicaciones. La sociedad, creada hace tres años, tiene hoy en día clientes de gran importancia en todo el territorio nacional.

¿Cuándo y por qué fundaron la cooperativa?

-- La cooperativa como tal empezó a funcionar en el año 2000. Antes, estuvimos un tiempo trabajando juntos.

¿Procedía alguno de ustedes del sector informático?

-- Pues, a medias. En mi caso (habla Joaquín Salas) yo había sido toda mi vida mecánico de motocicletas. Los demás socios sí estudiaban informática cuando nos conocimos.

Y al final han montado una empresa que, parece ser que en tres años, está dando excelentes resultados, al menos en cuanto a conexiones, nunca mejor dicho...

-- Bueno, la verdad es que sí, en estos tres años que tenemos de existencia la cooperativa ha ido siempre para arriba.

Ustedes pertenecen a Faecta, ¿en qué les ha beneficiado esta circunstancia?

-- Pertenecemos desde hace unos meses y la verdad es que estamos recibiendo bastante apoyo. Si bien hasta ahora no hemos recibido mucha ayuda oficial, la verdad es que los proyectos de inversión que estamos realizando están teniendo muy buena acogida tanto por la federación de cooperativas, como de la Junta de Andalucía.

¿Es muy costoso su plan de inversiones?

-- Nuestro plan de inversiones ronda el millón de euros.

Si les parece, vamos a explicar, de la manera más clara posible, cuál es su trabajo...

-- Empezamos como como una consultora de sistemas, que es una empresa que realiza trabajos de informática muy sofisticados, los asesora y los implanta. Hablamos siempre de sistemas centralizados, de comunicación de datos y cosas de ese tipo. Poco a poco fuimos derivando más hacia las comunicaciones de forma que empezamos dando servicios de internet y hemos acabado como operador de telecomunicaciones. En cuanto a los trabajos de ingeniería de redes y de consultoría de sistemas, pues eso se materializa en nuestro tipo de clientes, que son los que aquí en Andalucía se llama la gran empresa, que realmente en Cataluña serían las pymes. A este tipo de empresas le gestionamos, le instalamos, le configuramos toda la informática central. Por citar algunas empresas a las que prestamos servicios podríamos nombrar al grupo de Rafael Gómez Sánchez, Almacenes Vistalegre, Prasa...

¿Son ustedes conocidos fuera de Córdoba?

-- Nosotros, digamos que al contrario de lo normal, empezamos fuera de Córdoba. Aquí, hasta que nosotros no tuvimos clientes corporativos fuera de Córdoba, no nos escuchaban. Para triunfar en Córdoba, es necesario antes triunfar fuera. Los sistemas que nosotros vendemos tampoco tienen mucha aplicación en la empresa pequeña y la mediana y grande, simplemente no se fiaba. Clientes de fuera de Córdoba, claro que tenemos, por ejemplo Industrias Lecue, que es el primer suministrador de tubos de Andalucía; La segunda empresa de Extremadura, que es el grupo empresarial Magenta, entre otros, como Aegón.

Lo que se ve es que llevan dos líneas de trabajo distintas, pero muy relacionadas entre sí y que a la vez tienen grandes expectativas de futuro...

-- Son dos líneas de mucho futuro y muy complementarias. De hecho, nosotros somos operadores de telecomunicaciones porque los operadores tradicionales no tienen el tipo de producto que nuestros clientes necesitan.

Pero para conseguir eso tendrán que estar actualizándose permanentemente.

-- Aquí, una gran parte del tiempo se dedica a la investigación y a conocer nuevas tecnologías. Cuando surge una tecnología nueva nos centramos en ella y vamos abandonando la antigua.

En cuanto a volumen de facturación y empleo ¿cómo está la empresa actualmente?

-- Bueno, pues empezamos tres en un sótano, como todas las grandes empresas parecen que lo hicieron, y a los tres años de andadura trabajamos de una forma bastante estable unas 14 personas y ahora mismo no estamos a un nivel de facturación muy alto. No sabríamos dar una cifra exacta, pero debe andar entre 1,5 y 2 millones de euros. La verdad es que vamos duplicando la facturación cada año. Somos una empresa rentable, porque los dos últimos años hemos tenido beneficios, lo cual nos sitúa como los únicos operadores de telecomunicaciones con beneficio.

¿Se ven cotizando en bolsa como los otros operadores?

-- La verdad es que no nos gustaría crecer tanto, quisiéramos seguir con el tamaño que tenemos y creciendo de una forma razonable y sostenida. Si cotizáramos en bolsa como todas ellas, seguramente estarían bajando nuestras acciones. Yo creo que el tamaño que tenemos es óptimo, llevándolo a unos extremos razonables.

¿Es verdad que Bill Gates sabe de vuestra existencia?

-- Eso fue una anécdota. Cuando se presentó en Madrid el Window 2000, una de las conferencias las di yo (Joaquín Salas) y en esa mesa coincidimos. Yo creo que conocernos conocernos, igual no, porque conocerá a mucha gente.