La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, anunció ayer la realización de obras en el Puerto de Carboneras (Almería) que podrían facilitar el transporte de agua desde la planta desalinizadora de este municipio almeriense hasta los buques que partirían hacia Cataluña.

Narbona ha explicado, durante una rueda de prensa con motivo de la celebración de la 15 Conferencia de las Partes del Convenio de Barcelona, que estas obras, con un presupuesto de 10 millones de euros, permitirían transportar en unos meses el agua en caso de que la sequía se agudice y las condiciones climáticas sean "muy adversas".

Según ha indicado, la posibilidad de envío de agua a Cataluña desde la desalinizadora de Carboneras es "perfectamente factible", puesto que en la actualidad sólo se emplea el 20 por ciento del agua que genera la planta, que, ha dicho, tiene una "capacidad excedentaria".

Narbona ha añadido que esta posibilidad debe ser contemplada mientras Cataluña no disponga de las dos grandes plantas desalinizadoras cuya construcción está pendiente de concluir y que darán a la comunidad la "autonomía que sólo da el agua del mar".

En su opinión, el posible envío de agua desde territorios áridos como la provincia de Almería, "un ejemplo de gestión eficiente del uso del agua", pone de manifiesto la necesidad de reutilizar aguas y "lo absurdo de hablar de trasvases".