Los informes científicos que Alberto Contador ha entregado al comité de competición de la Federación Española de Ciclismo defendiendo que la presencia de clembuterol en su cuerpo se debe a una contaminación alimentaria se encuentran en Lausana.

Los juristas de la Federación han decidido enviar los alegatos de Contador a la Unión Ciclista Internacional (UCI) para conocer su opinión antes de dictar un veredicto, a fin de evitar, en lo posible, que el caso termine en el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS). Asimismo, han solicitado a la UCI que también tenga al corriente a la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) de los argumentos que diferentes especialistas han elaborado defendiendo la versión de Contador, contraria a cualquier argumento de dopaje.

La UCI se ha comprometido en dar una respuesta a la Federación Española al inicio de la última semana de enero. Será entonces cuando el comité de competición ya tendrá todos los argumentos sobre la mesa para poder dictaminar sobre el caso, que ya se alarga más de cinco meses.

En cualquier caso, no se espera una resolución hasta febrero. Contador acudirá a finales de enero a la concentración de su equipo, el Saxo Bank, que efectuará en Fuerteventura. El tricampeón del Tour está convencido de que sus argumentos son "incuestionables" y que demuestran que no ha habido ninguna infracción del reglamento.