Sal en los zapatos: el 'trucazo' inédito que sustituye a los desodorantes

El calor ha irrumpido en España para quedarse: desde finales de marzo, las temperaturas son muy superiores a las que podríamos esperar en primavera. Una de las principales consecuencias está en la ropa que llevamos: cuando empieza a hacer calor, tenemos que vestirnos con prendas más frescas y cortas, adaptadas a las necesidades climáticas.

Pero, no solo cambiamos los abrigos por los pantalones cortos: los zapatos también tienen que adaptarse a las temperaturas veraniegas y cada vez vemos más sandalias y modelos abiertos que permiten que el pie respire a lo largo de todo el día.

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Además de cambiar de zapatos, durante la temporada de verano también tenemos que mejorar la higiene personal: incrementar los momentos de aseo y utilizar productos desodorantes para mitigar los malos olores producto de la sudoración. En muchas ocasiones, aunque tengamos una buena higiene, es prácticamente imposible eliminar el olor debido al gran número de glándulas sudoríparas que hay en los pies.

El mal olor en los zapatos se incrementa, además, si no se trata de un material de muy buena calidad en los que la humedad y el calor se retienen con facilidad.

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Sal en el zapato: el truco para eliminar los malos olores de los zapatos

Existen cientos de productos disponibles en el mercado para mitigar los malos olores en los zapatos, pero normalmente estos productos son caros y están hechos ab ase de químicos.

Una alternativa a estos productos para dinero es fabricar un desodorante casero con tres sencillos ingredientes naturales que todos tenemos por casa: además de tratarse de una medida efectiva, es muy rápida de preparar.

El método de la sal para acabar con los malos olores es muy sencillo: tan solo hay que mezclar un puñado de sal de cocina con almidón de maíz, una combinación que ayudará a erradicar la humedad. Después de eso, hay que espolvorearlo por encima de los zapatos o introducir la mezcla en una bolsa o pañuelo cerrado dentro de los zapatos.