David Sánchez: "Cada vez dejamos menos espacio para la naturaleza"

David Sánchez es un estudiante de segundo curso del grado de Biología de la UCO y también es el anillador científico de aves más joven de España, de un total de 585 anilladores.

-¿En qué consiste el anillamiento científico?

-Mediante métodos de captura incruentos, se retiene al ave el tiempo justo para colocarle una anilla con un código alfanumérico, que es lo que individualiza al ave, después se le toman datos y a volar. Los datos recibirán un tratamiento informático y se volcarán en una base para consultas, muy útiles para conocer más acerca de nuestros ‘vecinos alados’. Esta herramienta no sólo nos permite conocer qué especies de aves frecuentan un lugar, sino también las rutas que siguen en sus migraciones, sus tendencias en cuanto a la muda del plumaje, su condición física, su biología reproductiva, etcétera.

-¿En qué situación se encuentra actualmente España, en cuanto a los fenómenos, especies y cambios en el entorno de las aves?

-Por desgracia, aunque hay mucha conciencia medioambiental, cada vez dejamos menos espacio para la naturaleza y sus inquilinos con la contaminación, la sobreexplotación de los recursos naturales, el crecimiento de las ciudades… Todo esto, evidentemente, afecta negativamente a las aves. Por poner un ejemplo, es preocupante la desaparición de los gorriones de nuestras ciudades.

-Eres el anillador científico de aves más joven de España, ¿qué supone para ti dicho reconocimiento?

-Me ha gustado saber que soy el anillador más joven de España, pero sinceramente pienso que cualquier persona mayor de 18 años puede llegar a convertirse en anillador, lo único que hace falta es un poco de esfuerzo y mucho entusiasmo por la naturaleza.

-¿Cómo han sido las labores que has tenido que llevar a cabo para conseguir el certificado como anillador científico?

-Hacen falta un mínimo de 2 años de preparación antes de poder presentarte a examen, en mi caso fueron 3 años. En esos 2 años tienes que intentar asistir al mayor número de jornadas de anillamiento posibles para desenvolverte mejor en este mundo y conseguir los conocimientos necesarios para poder pasar las pruebas teórico-prácticas. La ilusión por conocer más sobre el mundo de las aves hace el resto.

-Eres estudiante de segundo de Biología, ¿cómo afrontas el resto de tu carrera universitaria?

-Muy motivado por conocer más sobre la Biología, con ganas de conseguir mi titulación y deseando poder aportar mi granito de arena ‘biológica¡’ a la sociedad.

-¿Qué metas te has propuesto?

-Acabar la carrera de Biología, conseguir meterme en algún departamento, trabajar en algo relacionado con la biología, y lo último, y más importante, no dejar de disfrutar de la naturaleza.

-¿Por qué te decidiste por este mundo?

-Con una infancia y una juventud tan marcadas por el contacto con la naturaleza, estaba cantado que la biología fuera la opción preferente de estudio. Me metí en el mundo del anillamiento a los 13 años, y desde entonces he querido saber más sobre este tema, quizá ese fuera el motivo.

-¿Dónde te ves en un futuro?

-Trabajando en la Estación Biológica de Doñana, en el departamento de alguna universidad o incluso de educador ambiental, ¡quién sabe!