MODA

Palomo Spain saca su "instinto más carnal" en la pasarela de Nueva York

El diseñador de Posadas presenta su propuesta de primavera-verano para hombre, con un sello romántico y provocador, en la Gran Manzana

Nora Quintanilla (Efe)

La firma cordobesa Palomo Spain sacó su "instinto más carnal" este sábado en la Semana de la Moda de Nueva York, donde presentó una propuesta de primavera-verano para hombre romántica y provocadora a partes iguales, y acompañada de una colaboración con la marca Bimba y Lola.

El diseñador de Posadas Alejando Gómez Palomo, alma de la firma, fue el protagonista de la segunda jornada de moda en Nueva York con las propuestas "Cruising in the rose garden" y "Bimba y Palomo", que desplegó en medio centenar de conjuntos en una sala palaciega llena de rosas en el famoso Hotel Plaza.

Entre bambalinas, aseguró a Efe que Palomo Spain ha vuelto "al instinto más carnal y más sexual que ha habido en la marca", en contraposición a la temporada pasada, más naíf, que evocaba la infancia y "cómo escogíamos la ropa cuando no teníamos el concepto todavía del género o de la sexualidad".

El público acudió a la cita con Palomo engalanado con sus creaciones y exclamó ocasionalmente "Yes!" (¡sí!) al paso de los modelos, que exhibieron una masculinidad sensual con vestidos delicados con volantes, "tops" con encajes y bordados, y sus famosos "pantalones con el culo al aire", con botonadura en el trasero.

El chico que indagaba en el armario de su madre es ahora un hombre "ya crecido, experimentado y que sabe de lo que va el mundo", de ahí la transición de estilos: de lo bucólico a algo "mucho más oscuro y perverso, casi peligroso", pero sin perder el estilo romántico que "caracteriza a Palomo", apuntó.

Elemento central fueron las rosas, también símbolo de la marca, que brillaron en la colaboración con Bimba y Lola: bolsos, collares y pendientes de flores "oversize" o construcciones de punto que apilaban las flores en vestidos o suéteres, así como chaquetas y bolsos de cuero con bolsillos voluminosos.

El diseñador, referente de la moda sin género, incluyó varias modelos femeninas y prendas para mujer gracias a la colaboración "Bimba y Palomo", lo que ha supuesto una novedad por llevarlo a "trabajar directamente sobre una silueta femenina", pero, apostilló, "sin perder" su visión "'queer' de la ropa".

La colaboración, abundó, se centra en las sinergias: Palomo Spain "sube" a Bimba y Lola a la alfombra roja y a la categoría del lujo en Norteamérica, donde esta se está introduciendo, mientras que el diseñador, ya establecido allí, accede a una "infraestructura" y recursos económicos que dan alas a su creatividad.

[object Object]

Se trata de la cuarta incursión de la firma en la Semana de la Moda de Nueva York, fruto un ascenso imparable que empezó en 2015 y sobre el que el diseñador reflexiona, asegurando que no ha sido un camino de rosas pero reconociéndose orgulloso de lo conseguido: la apertura de la sociedad y de la moda.

"El panorama ha cambiado dramáticamente desde que empezamos hasta ahora, recuerdo la primera vez que vinimos a Nueva York: la gente no entendía todavía lo que hacíamos", cuenta el modisto, cuya alta costura para hombres viste hoy a las celebridades y hasta fue expuesta en el Met de Nueva York.

No le faltan ejemplos: "La primera vez que vio (la influyente editora de Vogue) Anna Wintour mi colección dijo: ¿Ah, así visten los hombres en España? (...) Incluso los modelos no querían desfilar con nuestra ropa y cancelaban a última hora porque no se sentían cómodos".

"Ahora ves un chico 'skater' en la calle con las uñas pintadas, un collar de perlas, el pelo rosa y un vestido grande, y no se asocia ya ni a un tipo de sexualidad ni de identidad de género, y eso claro que está influenciado por el poder que tiene la pasarela, que se va filtrando hasta la calle", explica.

Definiéndose como "precursor de ese movimiento", Palomo Spain reconoce que la Gran Manzana es una gran inspiración y esa conexión se refleja en su acogida, pues "casi el 80 % de la facturación viene de Estados Unidos"; un país, dice, en el que se confía en el talento, hay mecenazgo y se "premia el vestirte".

"Si haces un esfuerzo y te pones una blusa bonita, te van a decir por la calle: 'You look amazing' (estás fantástico) y en Europa quizás somos más de mirar por encima del hombro y de que nos choque, a pesar de que nos creamos los reyes del estilo", comentó, con espontaneidad.