Dos de cada tres menores atendidas en el programa de víctimas de violencia de género de entre 14 y 17 años, un 66,7%, no sólo habían sufrido violencia psicológica, sino también agresiones físicas y violencia sexual. Así lo explicó ayer en el Parlamento la consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, tras presentar el Informe Anual de Violencia de Género 2012.

De las 82 menores atendidas en el primer año de funcionamiento de este programa, el 35% tenía 17 años; el 27%, 16 y el resto menos de 15 años. Las terapias del programa persiguen restaurar el daño sufrido por las menores en su relación con los agresores, prevenir recaídas y fomentar las relaciones igualitarias. El plan ofrece atención psicológica especializada a menores y apoyo emocional, información y orientación a las madres, padres o tutores de estas mujeres para minimizar las consecuencias de la violencia de género y prevenir nuevas relaciones de pareja no igualitarias. Sánchez Rubio explicó ayer que la puesta en marcha de esta iniciativa responde al aumento de la violencia en las parejas jóvenes. En lo que va de año, el 30% de las víctimas mortales de violencia machista en Andalucía han sido menores de 30 años y, desde 2009, se detecta un progresivo aumento de víctimas mortales en los tramos de edad de menos de 20 años y de 21 a 30 años. La formación y prevención entre los jóvenes se refuerza también con el Programa Forma Joven, que promueve conocimientos, actitudes y valores contrarios a la violencia en los entornos de jóvenes y adolescentes.