VUELTA AL COLE

Alerta Sanitaria: este es el material escolar que provoca reacciones alérgicas a niños

Recomiendan extremar la precaución con artículo tan inocentes como las ceras de colores o la pintura para dedos

Alerta sanitaria por la vuelta al cole por material escolar

Alerta sanitaria por la vuelta al cole por material escolar

Las alergias alimentarias en niños son una de las principales preocupaciones de la vuelta al cole, por eso los comedores escolares, padres y profesores extreman las precauciones cada mes de septiembre para prevenir crisis alérgicas y actuar correctamente en caso de que ocurran.

Una de las alertas que ha dado la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP) ha sido respecto a una de las cosas más importantes relativas a la vuelta a las aulas, pero menos sospechosas de provocar reacciones alérgicas: el material escolar.

Material escolar, foco de reacciones alérgicas entre los más pequeños

SEICAP ha puesto el foco en pegamentos, plastilina, tizas o ceras que habitualmente utilizan los más pequeños para trabajar en clase. El motivo: la presencia de alérgenos como la soja, el gluten o la proteína de la leche en su composición.

Según los expertos, el contacto de una persona alérgica con estos materiales podría hacer "peligrar la seguridad y la vida de los niños con enfermedades alérgicas, asma o inmunodeficiencias primarias (IDP) en la escuela.

En concreto, los artículos donde SEICAP y otras asociaciones han encontrado alérgenos alimentarios son:

  • Ceras de colores: soja, legumbres o cereales.
  • Tizas: proteína de la leche.
  • Plastilina o pasta para moldear: gluten.
  • Pinturas para dedos, acuarelas o témperas: frutos secos.

El problema de esto es que, al no tratarte de productos de consumo, muchos fabricantes no incluyen "información sobre los alérgenos en estos útiles escolares, llegando a responder, en algunos casos, que el material escolar no se come".

¿Cómo prevenir las reacciones alérgicas por material escolar?

Tal y como explican desde SEICAP, la única solución para prevenir las reacciones alérgicas por material escolar es comprobar si realmente existen los alérgenos en los útiles y, en caso de que efectivamente se encuentren en su composición, sustituirlos por otra alternativa que no los contenga.

Según Juan Carlos Juliá, doctor que coordina el Grupo de Trabajo de Educación Sanitaria, "no hay que discriminar en ninguna actividad del centro al niño por su alergia; lo que se debe hacer es disponer siempre de una alternativa. Además, es necesario disponer de medicación de emergencia en el centro en un lugar accesible".