Un combativo Córdoba Futsal roza la gesta ante el Movistar Inter

Ofensivas desmedidas

El Jorge Garbajosa se convirtió en un infierno desde el primer minuto. Sin tanteo ni premura, Cecilio Morales se sacó una jugada combinativa de la chistera para culminar con un trallazo a la cruceta cuando todavía había gente ubicando su sitio. Eran primeros compases de dudas y muchos espacios en la retaguardia, en los que los de Josan González no estaban sabiendo defenderse. Los interistas, por la otra parte, habían salido lanzados y con pocos remilgos, abanderados por un Cecilio al que no le pesaba en absoluto jugar contra el equipo de su tierra. El montoreño pronto pasó del dicho al hecho y, dos minutos después de su primera ocasión, sirvió la jugada del primero para que Zequi la mandase a propia meta, 1-0. 

Tocaba remar de inicio, aunque el mazazo no sacó al Córdoba Futsal de su letargo. La segunda unidad saltó a escena de la mano de un Pablo del Moral clarividente en su regreso, pero sin la fórmula para despertar a un cuadro blanquiverde todavía en trance. La sangre se olía a kilómetros, algo que Cecilio volvió a aprovechar. Dos minutos después del primer tanto en Torrejón de Ardoz, el ala cordobés volvió a marcharse por banda para remachar con el segundo. No hubo réplica, por lo que también le siguió el tercero. Raúl Gómez tiró de calidad para sacar una vaselina de muchos quilates, que igualmente superó a Prieto para llevar la renta a márgenes preocupantes en los primeros diez minutos. Los blanquiverdes estaban noqueados y tocaba alterar el plan. 

Jesulito controla el balón ante Borja. Movistar Inter

Josan Gónzalez recibió la comanda y comenzó a mover piezas y cambiar premisas. Ya no había nada que perder, solo que ganar. Desde ese contexto y fuera de presión la cosa cambió. Jesús Herrero se estrenó con un paradón a Ismael y poco después con otra mano salvadora para desviar al palo el chut de Jesulito, por lo que al menos ya conocía de qué pie cojeaba el Córdoba Futsal. El minutero corría sin piedad y el cuadro blanquiverde se esforzaba para recuperar terreno, algo que por insistencia terminaría llegando. Shimizu fue el líder del arreón, con una contra de libro en la que fusiló a Herrero para poner el primero. Poco después lo emuló Saura, en el relevo del nipón, aprovechando un robo de Caio para martillear nuevamente la meta madrileña, 3-2. Quedó en espejismo, pues acto seguido Igor Carioca puso el cuarto para ampliar nuevamente distancias antes del descanso. 

Cambio de papeles

Tras el tiempo de refresco se vio otro guion. Ahora era el Córdoba Patrimonio de la Humanidad el que había saltado con las ideas más claras, sacando su versión más expeditiva para echar el cerrojo atrás y poder prodigarse en ataque. Desde ese contexto lo intentó pronto Jesulito, con una ocasión clarísima ante Jesús Herrero en la que su disparo se marchó rozando el larguero. Prieto, acto seguido, sacó el quinto de Pol Pacheco en el contraataque, con un disparo seco que el madrileño desvió mediante una estirada antológica para mantener a los blanquiverdes con vida. Había partido. 

El crecimiento de los de Josan Gónzalez en el Jorge Garbajosa ya era innegable. La insistencia califa había embotellado al Movistar Inter en área propia y por primera vez, el poderoso cuadro azulón se estaba viendo sometido. El premio para los blanquiverdes también estaba al llegar. Finalmente lo cobró Perín, por partida doble, recortando distancias con una jugada combinativa sobresaliente con Saura y poniendo el cuarto del empate mediante un potente chut cruzado tras la asistencia de Pablo del Moral. Jesús Herrero nada pudo hacer ante el acierto del brasileño, que devolvía las tablas a Torrejón de Ardoz a falta de once minutos para el final. 

Con el empate la cosa se embarró. Prieto protagonizó otro paradón ante Cecilio y los interistas volvieron a estirarse bajo la batuta de Raúl Gómez, que rozó el quinto tras una acción escandalosa por banda, pero se encontró con el palo tras superar con un sombrero a Pablo del Moral. Zequi respondió en el Córdoba Futsal, con un trallazo al contraataque que volvió a exigir lo mejor de Jesús Herrero. El duelo era titánico, pero Josan González quería más. El pontanés, inconformista, sacó el juego de cinco con Jesulito, algo que Tino Pérez igualó en su apuesta con Cecilio. La lucha volvía a equipararse en las superioridades, aunque no quedaba tiempo. Finalmente, entre idas y venidas, un paradón de Prieto a Pol Pacheco y un Jorge Garbajosa candente, el Córdoba Futsal selló su primer punto de la historia ante el todopoderoso Movistar Inter. El playoff sigue al alcance.