PATIO SINGULAR (cuidado por un colectivo) (categoría A). Más de 100 metros.

CUIDADORES

Voluntarios de la hermandad de San Rafael, con Fernando Cruz Conde y Purificación Díaz coordinando el equipo.

EL DETALLE

Aunque hay un antiquísimo brocal recuperado, fue una sorpresa hallar un pozo medieval en una dependencia que se recuperó ya el pasado año.

LA PLANTA

Las buganvillas, plantadas hace años, ya cubren de color paredes en dos recintos tan grandes, donde se cuida mucho, además, las plantas de verde.

Si hubiera en el concurso un premio a la modestia se lo llevarían ‘del tirón’ las voluntarias de la hermandad de San Rafael, que en solo seis años en concurso y dos fuera de competición han dignificado, rehabilitado y puesto en valor la antigua casa del sacristán, Rafael Montes, al que se echa de menos. Nada menos que dos patios, una capilla de la Virgen de Fátima y una vivienda con elementos de siglos. Y todo ello sin presumir, que podrían hacerlo. De hecho, y también como el que no quiere la cosa, este año abrirán los días que puedan y fuera de concurso el Patio de la Cruz (San Rafael 3), separado de los dos patios que compiten, pero también anexo a la iglesia del Juramento. Y todo ello solo por el «gusto de que Córdoba disfrute del patio», dice Purificación Díaz, obviando el trabajo que conlleva y definiendo perfectamente el espíritu de la Fiesta de los Patios. Con toda modestia.