Opinión | No me digas...

Nelson y la Virgen de la Cueva

«Se impone mejorar la conexión, con carácter definitivo y estable, entre La Colada y Sierra Boyera»

El almirante Nelson fue el principal agente de la pérdida del dominio de España sobre el mar, sobre las aguas. En estos días, Nelson, la borrasca Nelson, nos devuelve, si no el dominio sobre el agua, sí el abastecimiento. Lo cual es de agradecer, particularmente, en el norte de la provincia, donde, desde que se secó el embalse de Sierra Boyera, los ciudadanos reciben por los grifos agua no potable procedente del de La Colada, además de otra potable a través de camiones cisterna. Llegado es el momento de poner las cartas sobre la mesa, algunas de las cuales, o todas, por cierto, ya han venido siendo trabajadas en profundidad por la Plataforma Unidos por el Agua. Tras más de un año de desabastecimiento normalizado, lo que tienen claro los ciudadanos es lo siguiente: primero, que, de cara a que no vuelva a suceder lo que ha sucedido, se impone mejorar la conexión, con carácter definitivo y estable, entre La Colada y Sierra Boyera. Segundo, proceder urgentemente a la descontaminación de la Colada con la instalación de la tecnología punta necesaria. Tercero, prohibir de manera tajante el vertido de más contaminantes orgánicos a La Colada y vigilar su estricto cumplimiento. Cuarto, proceder a la conexión de ambos embalses, a medio plazo, con el de Puente Nuevo. Quinto, proceder a la renovación y mejora de las instalaciones de depuración que sean necesarias en la zona norte. Sexto, llevar a cabo un profundo y responsable trabajo de revisión de las conducciones, ya que es imperdonable que, en pleno siglo XXI, no se acometa la salvaguarda y la protección del abastecimiento de un bien imprescindible y escaso en algunas comarcas, como es el agua. Lo que los ciudadanos esperan, ahora, no es que los responsables técnicos y políticos mezclen el agua de ambos embalses de La Colada y Sierra Boyera, ni que se vuelva a institucionalizar en el tiempo un abastecimiento que parta únicamente desde Sierra Boyera, como antes. El problema debe abordarse de manera que solucione las dos cuestiones: la descontaminación, y una alternativa a una sola fuente de abastecimiento. No podemos confiar siempre en Nelson. Ni en la Virgen de la Cueva.

*Escritor | @ADiazVillasenor

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