Opinión | GUADALQUIVIR

El Pacto del Majestic

Viene el Guadalquivir marcial y verde oliva por todos los jóvenes cordobeses que un día sirvieron a la patria prestando el servicio militar, y en consideración por quienes ya no tuvieron esos días de gloria patria, gracias al presidente Aznar y al honorable Jordi Pujol. Estos días de noviembre he recordado que hace ahora cuarenta años juré bandera en el campamento de Colmenar Viejo. Fueron, apenas, dos meses de instrucción pertinaz para que todo resultara muy preciso y militar un 20 de noviembre de 1983. Horas y horas repitiendo, izquierda derecha, a cubrirse, descubrirse, presenten armas, media vuelta, y volver a empezar. Ni los chicos del coro, ni los niños cantores de Viena alcanzaban tal grado de perfección. Y todos juramos una bandera con un águila muy grande junto a un cura muy pequeño cargado de medallas.

Y luego el destino. Un cuartel sabatino en Leganés con boina negra y siempre de maniobras militares. Las frías mañanas de dianas vestidos de uniforme militar español: calzoncillos blancos, botas negras y gorra verde. Siempre corriendo, siempre angustiados con entrenamiento bélico, aprendizaje de disparos, capacidad de reacción, supervivencia, aguante estoico de más de una orden sin sentido, castigos, calabazos, armamento, guardias interminables, retreta, final del día y siempre el himno machacón del coro belicista «Ardor guerrero vibra en nuestras voces...». Un año de tu vida conviviendo con vascos y catalanes, fortaleciendo lazos de amistad con aquellos muchachos que hablaban entre sí su lengua materna. Comprendí mejor a mis compatrioatas.

Bueno, mi cuartel ahora es la sede de la Universidad Carlos III, otros cuarteles forman parte del entramado urbano de la ciudad, véase en Córdoba el cuartel San Rafael en la avenida Medina Azahara. Todas las ciudades españolas se han visto beneficiadas por el cierre de aquellos cuarteles militares donde tantos jóvenes pasaron algunos años. Los insumisos crecieron exponencialmente a finales de los noventa. Nuestro ingreso en la OTAN cambió el concepto de la defensa territorial. El Pacto del Majestic entre Aznar y Pujol puso fin a dos siglos de servicio militar obligatorio. Y no hubo ni que modificar la Constitución. Me queda la cartilla blanca, una foto descolorida con uniforme caqui y un montón de amigos.

** Doctor en Historia

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