El domingo se celebran elecciones presidenciales en Colombia para el periodo 2010-2014, con un panorama bastante reñido como hacía tiempo no se vivía en el país. La candidatura oficialista, respaldada por Uribe, que encabeza como candidato a la presidencia Juan Manuel Santos, quien fuera ministro de Defensa en el gobierno colombiano, acompañado como candidato a vicepresidente por Angelino Garzón, quien fuera gobernador del Valle del Cauca. Esta candidatura del Partido de la U mantiene una ligerísima ventaja en el último sondeo de voto publicado en la prensa colombiana. En segundo lugar, aparece casi en un empate técnico, la candidatura presentada por el Partido Verde, que presenta a la presidencia a Antanas Mockus, que fuera alcalde de la ciudad de Bogotá en dos periodos y a la vicepresidencia Sergio Fajardo, que obtuvo popularidad mundial como alcalde de Medellín, recibiendo varios premios internacionales a la mejor gestión municipal. Además de los dos partidos citados, que aparecen como favoritos en las encuestas, también presentan candidatura presidencial los siguientes: Partido Cambio Radical, Partido Conservador Colombiano, Partido Liberal, Polo Democrático Alternativo y varias candidaturas independientes. De los sondeos se extrae el dato de que ninguno de los dos principales candidatos llegará a la mayoría absoluta el 30 de mayo, posibilitando así la realización de una segunda vuelta entre los dos más votados a celebrarse el 20 de junio próximo. Será interesante contemplar las posibles alianzas posteriores al domingo para conseguir el voto electoral del resto de fuerzas que se presentan. La candidatura de Mockus y Fajardo ha subido como la espuma. Ambos cuentan con una popularidad manifiesta en todo el país, más allá de sus incondicionales Bogotá y Medellín, y se presentan como una opción limpia, regeneradora de la vida política del país y cargados de proyectos que favorezcan el desarrollo equilibrado e igualitario de las regiones más empobrecidas de Colombia. Muchos de sus posicionamientos y propuestas coinciden con los que plantea el Polo Democrático Alternativo, por lo que no se descarta la adición para la segunda vuelta de ambas fuerzas. La candidatura oficial de Santos ha ido perdiendo fuelle durante toda la campaña, pues el partido de la U va a sufrir el lógico desgaste gubernamental y Santos no alcanza en popularidad a la que aún mantiene Uribe, lo que ha provocado algunas pugnas internas en el partido que han ayudado a enturbiar su imagen pública y la propia campaña de su candidato.

Colombia se juega mucho. Observaremos con atención los resultados del domingo.

* Asesor Relaciones Internacionales