Así como en la antigua Grecia, Heródoto enseña a contar la historia a pie de tajo, relatando los hechos allí donde suceden, en la Córdoba de nuestro tiempo Miguel Salcedo Hierro es el cronista por excelencia. No se limita a los acontecimientos públicos y oficiales para levantar acta de la actualidad, sino que va más allá para recoger e interpretar la intrahistoria de la que hablaba Unamuno. Salcedo Hierro es el cronista total, como si él solo fuera un humanista andante por la ciudad, un periódico en el que caben todas las secciones. Escritor, poeta, dramaturgo y director de la Escuela de Arte Dramático, historiador, el Cronista se encuentra siempre en aquellos lugares en los que se asienta la vida histórica de los cordobeses (la Mezquita, la Ribera, el Potro, el Alcázar-), en Semana Santa, en la Feria de la Salud, en la Fuensanta y en las romerías de Linares y Santo Domingo (de la que es uno de sus más fieles hermanos y pregonero, quehacer éste en el que le han seguido su hija Marisol y su nieto Alvaro), degustando el vino y las tapas en las tabernas, espectador taurino, filósofo con Séneca, cantor de la mujer cordobesa con Julio Romero de Torres, taurino con Manolete, flamenco en sus raíces más profundas con Ricardo Molina, exaltador de devociones marianas, al pie de la Virgen de los Dolores y Nuestra Señora de las Angustias, seguidor del Córdoba Club de Fútbol aunque nunca se expusiera dar patatas a un balón- Omnipresente en las fiestas de las vendimias, en los patios, en los peroles-, en momentos de fiesta y dolor, tertuliano de las entretelas cordobesas con Matías Prats, Pepe García Marín, José María Ortiz Juárez- Tiene el cronista cinco soportes para escribir sus grandes y pequeñas historias. Diario CORDOBA: su firma ha llenado miles de páginas a lo largo de la existencia de este periódico; en ellas ha dejado su impronta sobre todos los temas en los que el cronista entiende y participa. La Academia: su soporte del saber, donde el académico ha aportado investigaciones y rescatado personajes olvidados. La Academia de Gastronomía, en la que su nombre está asociado a la divulgación de la cocina andaluza. Publicaciones: un soporte en el que el cronista deja un legado de obras, fundamentales para conocer la Córdoba de nuestro tiempo engarzada con la Córdoba del pasado. Y un soporte sólido: su familia, a la que ha hecho partícipe de su gran crónica humana, con Carmina, su extraordinaria señora, con Marisol y Ramón, y sus nietos Alvaro y Miguel, a la que se ha sumado la cofradía de sus amigos del alma, a la que tengo el honor de pertenecer.

* Periodista, profesor y director de la Enciclopedia de Córdoba, en la que aparece este artículo.