El futuro de proyectos como las dos comisarías que el Ministerio del Interior tiene que construir en un solar de Poniente y en otro de la Fuensanta depende de lo que ocurra en los próximos meses. Entregado el suelo por el Ayuntamiento a Interior, queda que este lo acepte y licite la redacción de los proyectos y las obras. En concurso está ya la rehabilitación de la fachada del Museo Arqueológico, aunque no es la única obra pendiente allí, por lo que queda camino que recorrer para completar la reforma iniciada hace años. No obstante, puede convertirse en una de las actuaciones que priorice el nuevo Gobierno cuando esté.

Un misterio seguirá siendo por más tiempo el futuro de otra iniciativa pendiente desde hace años, el Museo de Bellas Artes, que, aunque tuvo dotación presupuestaria, al igual que el Archivo Histórico, nunca llegó a ejecutarse. Sin construir siguen también los terrenos de la antigua prisión de Fátima, respecto a los que el futuro Gobierno ha de decidir si siguen valdíos o se urbanizan. Negociaciones, aunque estén avanzadas, a la espera hay algunas, entre ellas las de Caballerizas y el resto de instalaciones militares.