El anuncio de que la Agencia IDEA acudirá a la ampliación de capital de Rabanales 21 aportando 600.000 euros fue bien recibido ayer tanto en la ciudad como en el propio parque científico y tecnológico, y vino a sumarse a las buenas noticias comunicadas en los últimos días para la viabilidad de este proyecto. La alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, ha mostrado un empeño destacado en que el parque salga adelante pese a sus dificultades económicas y celebró «que damos un paso más» en esta línea.

En los últimos días, el Ayuntamiento ha informado de que la regidora municipal ha mantenido conversaciones con el director general de Cajasur, Francisco Javier Rapún, para promover que esta entidad financiera acuda a la ampliación de capital y, finalmente, así lo ha acordado, por lo que el Consistorio ha avanzado que «con esta decisión, todos los socios que forman parte del capital social de Rabanales 21 (a excepción de Prasa) hacen frente a los compromisos adquiridos en el plan de viabilidad, de forma que se garantice el futuro de una sociedad fundamental para el desarrollo económico de la ciudad en un espacio como el de la innovación».

De otro lado, el presidente del parque, Manuel Pineda, indicó que todavía no ha recibido el acuerdo adoptado ayer en la Agencia IDEA y «desconozco si habrá condiciones». Sin embargo, valoró de forma «muy positiva» que los cuatro socios mayoritarios de Rabanales 21 hayan decidido acudir a la ampliación y que así lo hayan trasladado al parque, ya que Cajasur, Caixabank y la Universidad de Córdoba se lo han comunicado por escrito y, previsiblemente, IDEA hará lo propio para disponer de su documento en el consejo de administración que se celebrará la semana que viene.

El parque tecnológico de Córdoba anunció su entrada en preconcurso de acreedores el pasado febrero y desde entonces ha trabajado para salir de esta situación. El presidente manifestó que «ha sido una carrera de fondo, estamos llegando agotados, pero llegando». También avanzó que en la próxima semana deberían levantar el embargo realizado por Hacienda y renegociar la deuda pendiente (la vencida es de 1,7 millones de euros), por lo que confía en contar con fondos para ello, ya que, de no ser así, la situación se complicaría y tendrían que hacer frente a recargos.

En este sentido, Manuel Pineda afirmó que «si se hacen los pagos (de la ampliación de capital) con agilidad para no tener más recargos, nos alejamos del concurso de acreedores». Además, comentó que «soy optimista de cara al futuro en estas condiciones» y calificó como «balón de oxígeno» el desbloqueo del proyecto para instalar una zona comercial.