El Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas aprobaron ayer un plan que incluye la adopción de «medidas especiales» en el tercer trimestre de este año para garantizar el suministro de medicamentos esenciales y que contempla también la revisión de las sanciones a las farmacéuticas. Se trata del plan de garantías de abastecimiento de medicamentos 2019-2020, elaborado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), al que dieron el visto bueno los consejeros de Sanidad en el Consejo Interterritorial de Salud, que presidió la ministra, María Luisa Carcedo.

Este plan persigue prevenir, gestionar e informar sobre los problemas de suministro de fármacos, con medidas concretas, como medidas reguladoras y un plan de control de medicamentos comercializados que se pondrá en marcha en el segundo trimestre. Según la Aemps, un total de 274 fármacos tenían problemas de suministro en las farmacias el pasado marzo, lo que afectaba a 488 presentaciones de las 31.495 autorizadas (el 1,5%).

La ministra y los consejeros también debatieron «de forma bastante intensa» sobre la designación de los once centros acreditados para implantar las terapias innovadoras contra el cáncer CAR-T, ya que algunas comunidades mostraron su desacuerdo con el reparto, como Madrid, Andalucía, Castilla-La Mancha o Navarra. Estas autonomías intentarán que, en seis meses, cuando se revalúen los criterios de asignación de centros, se tenga en cuenta el de la equidad territorial para ampliar el número de hospitales.

El consejero de Salud y Familias de Andalucía, Jesús Aguirre, anunció que pedirá al ministerio que los hospitales Virgen de las Nieves y Reina Sofía, se unan al Virgen del Rocío, para poder aplicar las técnicas avanzadas CAR-T. En su opinión, Andalucía, una comunidad muy extensa con 8,5 millones de población, y con la ratio de los pacientes que se «van a favorecer» de esas terapias, más la evolución que el tratamiento va a tener para otras patologías, «se queda chica con un único hospital de referencia: el universitario Virgen del Rocío», de Sevilla. Aguirre indicó que con esos tres centros médicos «estaría suficientemente bien dimensionada la población diana andaluza» para los pacientes con estas nuevas terapias.

Entre otros asuntos, sanidad y comunidades acordaron financiar el sistema de monitorización de glucosa tipo flash, que no requiere pinchazo, a todos los pacientes adultos con diabetes tipo 1, lo que beneficiará a 53.723 personas. Este colectivo se suma a los 13.250 menores de 18 años que ya disponen de este dispositivo, así como a determinados grupos con mayor riesgo como personas con discapacidad, embarazadas o aquellos que requieren al menos seis punciones al día para controlar la glucosa.

En la reunión se dio luz verde al Plan de Prevención y Control de la Tuberculosis en España, que actualiza el anterior de 2007, por una mayor incidencia de la enfermedad en poblaciones vulnerables y por la resistencia del propio germen a los antibióticos.