El dolor de muelas es uno de los más intensos e insoportables que puede sufrir una persona. En algunos casos de extrema intensidad, puede llegar a causar hasta el desmayo. Este dolor puede estar causado por una caries, pero también por la rotura de una pieza dental o por otras patologías.

Lo mejor en estos casos, desde luego, es consultar con un odontólogo para que diagnostique y solucione nuestro problema. Pero no siempre la consulta se realiza tan rápido como el dolorido paciente quisiera, así que mientras llega el momento de ponerse en manos de un experto, hay que recurrir a los remedios caseros para soportar el malestar.

Hay numerosos remedios que la sabiduría popular ofrece como calmante para los dolores de muelas, aquí recogemos unos cuantos.

Enjuagarse con sal

La sal es un potente bactericida natural que además no daña las mucosas de la boca. Por tanto uno de los remedios clásicos contra el dolor de muelas es enjuagarse la boca con agua tibia salada. Se puede realizar varias veces al día y de ese modo ayudamos a desinfectar la boca y calmar algo el dolor.

Aplicar frío

El frío es bueno para bajar cualquier tipo de inflamación porque reduce la circulación de la sangre en la zona afectada y adormece la piel. En este caso se puede usar un cubito de hielo pero no para aplicarlo directamente sobre la muela afectada, sino en la mejilla y envuelto en una pequeña toalla o gasa para que no cause daños. Los médicos avisan de que nunca se debe superar los 30 minutos aplicando frío a una inflamación porque puede provocar daños por congelación.

Ajo y cebolla

El ajo y la cebolla son dos productos que solemos tener siempre en casa y que podemos usar para paliar los dolores de muelas. No tienen una gran capacidad analgésica pero sí pueden ayudar a calmar las molestias.

El ajo cuenta con un compuesto llamado alicina que tiene propiedades saludables para la salud. Pero la alicina no está naturalmente en el ajo, sino que se produce cuando se corta o machaca el bulbo. Por tanto, para usarlo como calmante se debe cortar o machacar y aplicar sobre la muela dolorida. Se puede acompañar con algo de sal para aumentar su efecto.

La cebolla también es un antibiótico natural que se puede usar para paliar las infecciones dentales mientras esperamos que un odontólogo nos recomiende el tratamiento adecuado. Así, basta con colocar un poco de cebolla en las encías para que haga su efecto. También se puede masticar la cebolla durante unos tres minutos.

Clavo de olor

El clavo de olor, y concretamente el aceite o esencia de clavo, tiene una sustancia natural llamada eugenol que puede ayudar a combatir las infecciones y el dolor de muelas ya que es un sedante natural. Si tenemos clavo en casa podemos aplicarlo directamente sobre la encía o bien cocer un puñado de clavos de olor y realizar un enjuague bucal con el líquido obtenido.

Perejil

El perejil es una hierba aromática que también es frecuente en las cocinas españolas. Tiene propiedades antioxidantes. Masticar perejil varias veces al día es otro de los remedios caseros para combatir el dolor de muelas que ofrece la sabiduría popular.

Te negro

Un alimento más que podemos utilizar como medicina es el té negro, ya que contiene ácido tánico, que es antiinflamatorio y analgésico. El ácido tánico se encuentra también en el vino tino, las pasas o el café. En este caso, para usarlo como sedante se debe calentar una bolsita de té y aplicarla después (no muy caliente) sobre la zona dolorida. Se puede repetir en varias ocasiones durante el día.

Agua oxigenada

Aunque el agua oxigenada es usada con frecuencia para enjuagues bucales en casos de dolor de muelas, los expertos no la recomiendan por efecto abrasivo sobre las mucosas. En todo caso, aplicar sobre la zona con un bastoncillo o un pequeño algodón. Sé prudente con el agua oxigenada, no conviene excederse en su uso.

Vinagre de manzana

También podemos usar el vinagre de manzana del mismo modo que usaríamos el agua oxigenada, mojando un bastoncillo en el vinagre y aplicándolo a la zona dolorida.

Enjuagues con bebidas alcohólicas

Usar alguna bebida alcohólica como enjuague bucal es otro de los remedios caseros más usados para disminuir el dolor de muelas, aunque los especialistas no lo recomiendan. En casos de heridas tras una extracción el alcohol etílico puede retrasar la cicatrización. De cualquier modo, como método puntual para adormecer la boca, se puede realizar un breve enjuague bucal con bebidas alcohólicas.

Si ninguno de estos remedios funciona, hay que utilizar los fármacos adecuados para tratar el dolor de muelas pero, de cualquier modo, la mejor solución siempre es una visita al odontólogo para que diagnostique con precisión nuestra dolencia y prescriba el remedio más adecuado.