Con los 123 actuales escaños en la Cámara Baja el PSOE de Pedro Sánchez, en cierto sentido reminiscencia y secuela del que encabezara ZP, que sin embargo se anotó la excelente y loable creación de la encomiable y eficaz Unidad Militar de Emergencia (UME), y totalmente distinto, por múltiples razones, del socialdemócrata de Felipe González, se encuentra para la formación de gobierno con pocas alternativas viables, a no ser que el interesado sea capaz de hallarlas no desentendiéndose de la solución frankenstein, Rubalcaba dixit, gabinete tal que le llevó a la pasada convocatoria electoral, tras la duración aproximada de un parto humano en la gobernación. Las formaciones políticas de derecha y de centro derecha, gratis et amore y de motu proprio es previsible que no le van a facilitar las operaciones concernientes, pues la partida se juega en campo socialista que es donde se cuece la cosa, por mucho que mareen la perdiz, tratándola de pasar al área contraria.
La incorporación al Consejo de Ministros del pedigüeño líder morado, o de otro cualquiera de sus más allegados (as) ater ego, al parecer, no únicamente chocará frontalmente con el vano criterio de la dirección socialista, en ese sentido dizque mayoritario, así como de buena parte de la militancia, sino que, además, el citado le crearía a Sánchez más de un quebradero de cabeza, caso de comportarse el aludido como un tipo suelto, lo que es algo bastante probable que aconteciera a tenor de las posiciones demagógicas del mencionado personaje. Ya se resistió, en su día el Sr. González con sensatez y cordura a las añagazas y presiones del que entonces era primera figura de IU.
En vista de lo cual, lo que al respecto se refiere, como se apunta en algunos medios de comunicación social, de su principal consejero áulico, a no ser que se trate de un envite, órdago, o ardid más a añadir a los anteriores, sería urdir unos próximos comicios generales, esperanzado con la obtención de un incremento notable de asientos en la Cámara Baja a costa principalmente de los que desocupen los de la formación morada.
* Doctor ingeniero agrónomo. Licenciado en Derecho
